Camperismo
Invasión de caravanas: los problemas de convivencia que crean miles de turistas que duermen en sus vehículos
Se calcula que en España hay más de 300.000 vehículos de permiten hacer vida dentro y evitar el gasto en hoteles, alquileres y restaurantes
El fenómeno de las autocaravanas y las furgonetas tipo camper se ha convertido en una verdadera fiebre en España, la desmedida subida de los hoteles y la afición por viajar ha provocado que esta sea la opción elegida por miles de turistas, que además ven en esta actividad la posibilidad de dormir y vivir en la misma playa o al pie de su montaña preferida.
Lo primero de todo es explicar que no es lo mismo un vehículo tipo cámper (normalmente una furgoneta), que una caravana o una autocaravana. El vehículo tipo cámper se asimila a todos los efectos a cualquier otro vehículo de motor, y debe cumplir la misma normativa.
Vehículo camperizado
En paralelo las caravanas van a remolque siempre de un turismo o similar, por lo que no pueden aparcar donde les venga en gana, mientras que las autocaravanas cuentan con su 'propio motor', por lo que también son asimilables a una furgoneta.
El último censo de este tipo de vehículos data de 2022 y entonces ya se hablaba de unas 236.000 caravanas, 80.000 autocaravanas y unas 18.000 cámper, auqnue no existe ningún censo de las transformaciones caseras que permiten dormir dentro y hacer vida dentro de un vehículo.
Censo incierto
En cualquier caso hablamos con toda seguridad de más de 400.000 vehículos a lo que habría que sumar los extranjeros que vienen a España a pasar sus vacaciones.
La saturación de este tipo de vehículos ha provocado problemas de convivencia ya en algunos lugares del territorio nacional, en este caso los vecinos y la Policía Municipal de la localidad gallega de Cangas de Morrazo se quejan por la conducta incívica de algunos de ellos que aparcan y hacen vida a pie de playa.
Civismo
Una saturación tal que ha provocado que los vehículos cámper lleguen a aparcar incluso en el centro del pueblo, con los inconvenientes que ello genera.
La legislación española establece un marco legal que permite a estos vehículos aparcar como cualquier otro tipo de vehículo de motor, es decir respetando la legislación general de estacionamiento. Aunque deja en manos de los ayuntamientos la reglamentación de pernocta mediante las ordenanzas municipales.
Consulta la ordenanzas locales
En este caso la mayor parte de los ayuntamientos españoles permite aparcar y pernoctar a estos vehículos mientras no desplieguen toldos, cocinas, mesas o cualquier otro elemento que los asimile a vehículos acampados. Tampoco pueden nivelar las autocaravanas con calzos o similares.
Esto significa que pueden aparcar en las mismas plazas de los vehículos convencionales, pero no en las playas ni al pie de una montaña.
En este caso las multas a aplicar van desde la simple infracción de aparcamiento hasta un delito ecológico en caso de que cocinen y viertan aceite o aguas sucias, hablamos de una infracción que puede ir de los 200 euros a los 5.000 euros en función de lo que aprecien los agentes.
Numerosas localidades han creado áreas de pernocta que pueden estar incluso vigiladas donde es posible pasar la noche en estos vehículos sin ningún tipo de riesgo, pues suelen estar incluso vigiladas y permiten deshacerse de aguas sucias y rellenar los depósitos o tirar la basura.