Un guardia civil desvela el accesorio que no debes llevar puesto si no quieres que te paren en los controles

Una de las mayores incógnitas para los conductores es saber cómo eligen los agentes de la Guardia Civil a los conductores que paran en los controles de alcoholemia, drogas o de cualquier otro tipo. La verdad es que es un verdadero secreto.

Existe la leyenda urbana de que si llevas sillitas infantiles en los asientos traseros es difícil que te paren, porque lo normal es que un padre de familia no se complique la vida al salir de trabajar con los compañeros, pero la realidad es que nunca se sabe.

Leyendas urbanas

Pese a no existir ninguna regla escrita respecto a los criterios por los que pueden parar a unos conductores determinados, la realidad es que hay indicios que pueden a ayudar a ello.

Hace unos días hablábamos de un agente que en un foro explicaba que en su opinión las gorras eran un elemento definitivo.

No sólo gorras

Por un lado, llevar gorra al volante ya puede ser constitutivo de una infracción en sí, pues perjudica la libertad de movimientos, y por otro es un indicio raro, pues no es normal que un conductor lleve la gorra puesta dentro de un automóvil.

En este caso otro agente indica en el mismo foro que para él las gafas de sol ya son un indicio más que suficiente, pues aunque las puedan llevar para conducir cuando se para en un control deben quitárselas para que el agente pueda ver los ojos del conductor.

Recordemos que en los controles de carretera hay una zona de acceso en la que los agentes eligen a los conductores que deben soplar o realizar el test de drogas, dando prioridad siempre a aquellos en los que se detecte algún tipo de indicio.

De la misma manera que muchos conductores hablan de coches marroneros, que son aquellos con más probabilidades de que les paren por su elevada deportividad o por perfiles muy determinados, como los Seat Leon amarillos de los años 2000.