Práctico
El calvario de tener un coche sin etiqueta en Madrid: «No podrán ni sacarlo del garaje»
A partir del 1 de enero los madrileños que no se hayan acordado de sacar su coche sin etiqueta fuera de la capital van a tener serios problemas para evitar una buena multa
Hace ya casi tres años que las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) entraron en funcionamiento en la capital. Tal y como explicamos los medios de comunicación, la hoja de ruta de las prohibiciones a la circulación diseñada por el Consistorio madrileño ponía los pelos de punta.
Los primeros meses las limitaciones se ceñían a las calles centrales de la Capital, pero con el paso de los días se iría extendiendo por todo Madrid y aledaños, hasta ocupar todas las calles, avenidas y vías de titularidad municipal hace poco menos de un año.
Prohibido todo
En paralelo esa misma fecha se prohibió también la circulación de todos los coches sin etiqueta, aunque con la excepción que hacía referencia a los vehículos matriculados en la capital y que estén a nombre de vecinos empadronados en la capital desde antes de 2022.
Estamos a menos de un mes de que caduque esa excepción, lo que significa que todos estos coches sin etiqueta a nombre de madrileños que están al corriente de pago del Impuesto de Circulación y han pasado la ITV no van a poder circular.
Una prohibición cuestionable
En España a día de hoy hay matriculados unos 35 millones de vehículos de los que 25 millones son coches, entre los que se calcula que 7,6 millones no disponen de etiqueta, por lo que el 1 de enero no podrán circular por la capital 7,6 millones de coches españoles.
No hay que ceñirse sólo a los coches de madrileños, sino que mucha gente de fuera visita la capital cada fin de semana o en navidad y se van a encontrar con el mismo problema.
Es cierto que si nos ceñimos a la capital podemos hablar de algo más de 385.000 vehículos sin etiqueta empadronados de los que 246.000 son coches, que no van a poder ni siquiera salir de sus garajes a partir del 1 de enero sino quieren llevarse puesta una multa, pues no existe ahora mismo forma de circular por la capital sin que las cámaras de identificación de etiquetas detecten un vehículo.
500 cámaras y 6.000 municipales
Hay que tener en cuenta que hay más de 500 cámaras dispersas para el control de las matrículas, a las que hay que sumar los agentes de la Policía Municipal que también verifican etiquetas.
Habrá que esperar acontecimientos pero todo parece indicar que conforme se acerque el 1 de enero habrá una estampida de coches hacia pueblos y municipios fuera de Madrid donde no se controlan etiquetas. Lo que no quita que miles de vehículos queden ‘encerrados’ en garajes de la capital por el miedo de sus propietarios a sacarlos.
Una situación que es probable que obligue al Ayuntamiento a realizar algún tipo de acción especial o moratoria para que los madrileños puedan llevárselos. Tal y como decía recientemente uno de los responsables de una asociación de automovilistas, «no podrán ni sacarlos de Madrid», en referencia a lo que ocurrirá a partir del 1 de enero.