Práctico
Un mecánico desvela la marcha que debes usar en tu coche para aprobar la ITV
Estos profesionales del motor conocen algunos detalles que marcan la diferencia entre que un coche apruebe o suspensa la inspección
Además de ser una obligación, pasar la ITV se ha convertido en uno de los trámites más molesto al que tiene que enfrentarse el propietario de un coche, tanto que muchos talleres hacen negocio realizando revisiones pre-ITV y comprobando que todo está en orden.
En paralelo ofrecen también un servicio adicional que consiste en llevar el coche a la ITV sin que el propietario tenga que preocuparse. Que sea un mecánico quién lleva un coche a la ITV da más seguridad, al fin y al cabo puede hablar de tú a tú con el técnico de la ITV en caso de encontrarle algún fallo.
De mecánico a mecánico
Al final los conductores no son expertos en mecánica y muchas veces ni siquiera entienden los términos en los que le habla el inspector de la ITV.
Lógicamente los mecánicos son expertos a la hora de aplicar esos pequeños trucos o consejos de conducción que son completamente legales y que ayudan a pasar la prueba sin complicaciones.
Truco de experto
Por ejemplo cuando vas camino de la ITV es conveniente realiza tres o cuatro frenadas contundentes en una zona en la que no haya peligro con la finalidad de que el sistema de frenos funcione correctamente. Así se limpian y secan tanto las pastillas como los discos y las frenadas son mejores.
Sin duda la prueba en la que se miden las emisiones contaminantes es la más dura y complicada de todas, pues un suspenso supone normalmente tener que invertir una cantidad importante de dinero para arreglar el coche, cuando no mandarlo directamente al desguace.
En este caso el truco es bastante sencillo y funciona mucho mejor de lo que cabría pensar. En los coches manuales hay que circular en marchas cortas para que el motor se revolucione y se limpie así de carbonilla tanto el escape como el catalizador.
En el caso de los coches con cambio automático, una gran mayoría en la actualidad, el truco consiste en activar el modo S de la caja de forma puntual camino de la ITV, pues se trata del modo Sport que estira las marchas y tiene un efecto similar.
Conviene evitar un uso intensivo de este modo porque puede provocar que se dispare el consumo del vehículo, algo bastante habitual en estos casos.