La culpa siempre es del PP

Lo han vuelto a hacer. El PSOE lleva en el Gobierno desde que Pedro Sánchez ganó la moción de censura el 1 de junio de 2018, pero más de cinco años después sigue echando la culpa de todos los males que acechan al país al PP. Como si no hubieran tenido tiempo de arreglar aquello que pensaban que estaba mal, todavía hoy Rajoy es el punching ball del Ejecutivo.

Ayer fue Bolaños el que volvió a enarbolar el repetitivo mantra de culpar al PP. Preguntado por los recientes incidentes en el Cercanías en Madrid, el ministro que engloba el poder ejecutivo y el judicial cuestionó a los periodistas si sabían cuánto había invertido el PP en el Cercanías de Madrid. «Terminaré pronto, cero». Cero, igual que las soluciones que ofrece el PSOE para arreglar los problemas que han llevado a cortar el tramo entre Atocha y Recoletos.

El tren no funciona como debe, pero el responsable es un partido que no gobierna desde hace cinco años. El mismo que también tiene la culpa de que no se renueve el Poder Judicial y de la inestabilidad que reina en Cataluña desde los tiempos del procés. Suerte tienen en Génova de que no les achaquen también el precio del aceite, ya que las miradas por la subida del IPC se dirigen a la «guerra de Putin». En Moncloa no hay responsables, por mucho que fuera de nuestras fronteras sea incluso más barato comprar nuestro propio aceite.

Tenemos un Gobierno meritorio a la hora de echar balones fuera. Desconozco el nivel de autocrítica que hay de puertas para dentro –intuyo que escaso o nulo–, pero ante los micrófonos despliegan al máximo su oratoria propagandística. Si son capaces de concienciar a la sociedad de que ellos simplemente son los herederos de los problemas causados por otros, habrá un porcentaje de ciudadanos que seguirá votándoles. La alternativa, ya se sabe, es la derecha, cuya gestión ha provocado todo esto.