Cartas al director
Memoria Democrática (IV)
El artículo 2.3 de la Ley de Memoria Democrática dice textualmente: «Todas las leyes del Estado español, incluida la Ley 46/1977, de 15 de octubre, de Amnistía, se interpretarán y aplicarán de conformidad con el Derecho internacional convencional y consuetudinario y, en particular, con el Derecho Internacional Humanitario (DIH), según el cual los crímenes de guerra, de lesa humanidad, genocidio y tortura tienen la consideración de imprescriptibles y no amnistiables».
Miren, señores del Gobierno socialcomunista, el DIH no indica nada de lo que ustedes mencionan en dicho artículo 2.3. El DIH es un conjunto de normas que, por razones humanitarias, trata de limitar los efectos de los conflictos armados. En el DIH no se habla para nada de crímenes de guerra, ni de genocidios, y menos de torturas. Con el artículo 2.3 dan a entender que el DIH invalida la Ley 46/1977, de Amnistía; esta ley la anulan ustedes señor Sánchez, no mientan.
Más adelante, el artículo 5.1, dice textualmente: «Se declara la ilegalidad e ilegitimidad de los tribunales, jurados y cualesquiera otros órganos penales o administrativos que, a partir del golpe de Estado de 1936, se hubieran constituido para imponer, por motivos políticos, ideológicos, de conciencia o creencias religiosas, condenas o sanciones de carácter personal, así como la ilegitimidad y nulidad de sus resoluciones».
Según se desprende de este articulo 5.1, todos los tribunales, jurados y juicios, constituidos y celebrados a partir de 18 de julio de 1936, se declaran ilegales e ilegítimos y, por tanto, nulos. ¿Todos, o solamente los oficiados por una de las partes enfrentadas?
Entendemos por tanto, que los jurados y tribunales del Frente Popular, que juzgaron y condenaron a muerte a miles de personas, fueron legítimos y legales. Sin comentarios.
Queda claro, señor Sánchez, el tipo de Justicia que quieren aplicar, cuando en toda la Ley de Memoria Democrática solamente se respira odio y revancha del pasado. El odio y la revancha no son buenas compañeras de la paz y de la justicia.