¿Aló, Sánchez?

Parece que el batacazo del 28-M ha trastornado al presidente del Gobierno, a tenor de cómo se está comportando. Primero, convoca elecciones para el 23-J tras una noche de insomnio y de ira. Esta decisión, irreflexiva, crea serios problemas a una gran parte de la ciudadanía que ya tiene programada sus vacaciones, afectando a agencias de viaje, medios de transporte y reservas hoteleras. Para hacer más ruido, y que Su Persona se haga notar, estas inesperadas elecciones también van a alterar el desarrollo de la presidencia española del Consejo de la UE.

Y ahora nos sale con su infantil propuesta de hacer todos los lunes –hasta seis– un debate televisivo, con Feijóo de sparring, para demostrar al pueblo español todo lo que él vale y dejar al presidente del PP en evidencia. O sea, que se quiere montar un Aló, presidente en versión española. Lo que nos faltaba. ¿Nadie le ha contado a Sánchez la de miles de hogares que cambian de canal en cuanto le ven en la pantalla? ¿Será capaz de creerse que los españoles vamos a soportar cada lunes una perorata de las suyas? Parece que ni él ni sus asesores saben en qué sociedad viven, aunque ya el 28-M les ha mandado un retrato.

No hace falta debates a dos, señor Sánchez. Primero, porque es antidemocrático dejar fuera a los demás partidos que también tienen derecho a aparecer en la televisión. Y segundo: todos los españoles hemos vivido cinco interminables años valorando sus aptitudes de gobernante y anotando los embustes y filibusterismos de los que hemos sido testigos; y del señor Feijóo también sabemos que ha ganado cuatro mayorías absolutas. Por cierto, en las que ninguno de sus socios se comió un colín. Tampoco su vicepresidenta gallega. ¿Aló, Sánchez ? Qué horror.