Deportistas sin complejos

Lo han vuelto a hacer a lo grande. Unos deportistas sin complejos, con un entrenador sencillo y con buena cabeza. Potenciando la unidad y el compañerismo, sin importar de qué región sea cada jugador, sin individualidades egocéntricas. Y pensando siempre en el interés común de todos. Sintiendo un proyecto único, y orgullosos de ello. Ha sido la selección de fútbol. Con catalanes, vascos, madrileños, andaluces, castellanos, canarios,… Ojalá aprendieran nuestros políticos ultranacionalistas periféricos excluyentes.

La unidad de España se ha vuelto a simbolizar en estos diferentes futbolistas: sin rendirse y trabajando juntos. Y con el Rey de todos, entregando el trofeo en nombre de cada ciudadano sin nombre, de esos que defendemos orgullosos esa España no cainita, y que a la par estamos cada vez más cansados de aquellos que atacan todo lo bueno que representa nuestro país, nuestra democracia, nuestra Constitución y nuestra convivencia. Viva el fútbol, –pero todavía más fuertes e importantes–, ¡viva el Rey y viva España!. Que sí, que, –otra vez–, está más que demostrado que juntos somos mejores.