
El prior en la abadía benedictina del Valle de los Caídos atiende al diario El Debate
Santiago Cantera, relevado como prior del Valle de los Caídos
Alfredo Maroto será su sustituto por decisión del abad benedictino de Solesmes (Francia), Geoffroy Kemlin
El prior de la Abadía de la Santa Cruz del Valle de los Caídos, Santiago Cantera, ha sido relevado en su cargo por el abad de Solesmes, Geoffroy Kemlin, tras agotarse los tres trienios como prior administrador de la basílica, según han informado a Europa Press fuentes conocedoras de la decisión.
Según ha podido saber El Debate y corrobora la anterior agencia, el hasta ahora prior del Valle de los Caídos, el padre Santiago Cantera Montenegro, va a ser relevado de sus funciones en los próximos días. Se cumpliría así uno de los requisitos exigidos por el Ejecutivo de Sánchez para no expulsar a la comunidad benedictina. El monje ha mostrado en los últimos años una actitud firme ante los intentos de Sánchez de «resignificar» el Valle de los Caídos, y en 2019 se opuso a la exhumación de los restos de Francisco Franco de la basílica, en consonancia con el deseo de la familia.
En declaraciones a El Debate, el padre Santiago Cantera ha confirmado que el relevo se producirá a inicios de la próxima semana. Por otro lado, alaba a su sucesor como «un hombre de Dios, sensato y sereno».
El padre Santiago Cantera, de 53 años, se convirtió en prior de la comunidad benedictina en el año 2014, donde accedió en la treintena. Es un notable historiador con numerosas obras publicadas, como La crisis de Occidente. El religioso ha tratado de mantener siempre el Valle de los Caídos alejado de las disputas políticas para preservar su sentido primigenio: la oración de los monjes por los fallecidos de ambos bandos de la Guerra Civil española, y por la paz y la unidad de España.En el interior de la basílica subterránea del Valle, están enterrados más de 33.000 muertos de ambos bandos de la contienda, que el Gobierno de Sánchez pretende identificar y devolver a sus familiares, pese a que existen y están documentadas las cartas de consentimiento que las familias de los caídos dieron en su momento para que los restos de sus seres queridos fueran trasladados a la basílica.

Vista del Valle de los Caídos
Sin embargo, el relevo del prior del Valle de los Caídos difícilmente hará que el Ejecutivo de Sánchez cese en sus intenciones de «resignificar» el monumento erigido para honrar a todos los muertos de la Guerra Civil española. El presidente del Gobierno, que se mueve entre los partidarios de «dinamitar la cruz» y los que se contentarían con una «re significación» del conjunto monumental, ha tenido al Valle de los Caídos en su diana personal desde el comienzo de la legislatura. No en vano, una de sus primeras medidas fue renombrarlo como 'Valle de Cuelgamuros', que es el nombre del emplazamiento donde se ubica, pero evitando así toda referencia al conjunto monumental.
Si se confirma el cese del padre Santiago Cantera, el presidente del Gobierno habría conseguido uno de sus objetivos: relegar a uno de los más firmes defensores del Valle de los Caídos y de mantener su significado original de oración por todos los difuntos.

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Según Europa Press, el sucesor de Cantera podría ser el padre Alfredo Maroto. Sin embargo, hay que tener en cuenta que los benedictinos se rigen por un sistema de votación para las figuras del prior y del abad, y no se trata de una simple designación.
En cualquier caso, el padre Alfredo Maroto es un monje benedictino con un largo historial en el Valle de los Caídos. Ingresó en su abadía siendo ya sacerdote, y ha desempeñado distintos cargos de responsabilidad dentro de la comunidad. Se trata de un hombre fiel y leal, que ha colaborado estrechamente con el padre Santiago Cantera en los últimos años, y que también es un firme partidario de mantener el sentido original del Valle de los Caídos como lugar de reposo y oración por todos los fallecidos durante la contienda fratricida de 1936.

Un cartel indica la dirección para llegar al Valle de los Caídos
Este proceso coincide en el tiempo con la resignificación del Valle de los Caídos, renombrado como Cuelgamuros, siguiendo sus postulados de la ley de Memoria Democrática. En este contexto, según precisan las mismas fuentes, el Ejecutivo ha mantenido varias reuniones con la Iglesia en las que han participado el presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Luis Argüello, el cardenal arzobispo de Madrid, José Cobo, y el nuncio del Papa, Bernardito Auza.
Desde el mes de diciembre, se acordó que el interlocutor con la comunidad y la Santa Sede fuese el cardenal José Cobo, arzobispo de Madrid. Además, las mismas fuentes añaden que la Secretaría de Estado de la Santa Sede ha sido informada de todos estos encuentros, con el correspondiente respaldo a los interlocutores eclesiales. Por otra parte, señalan que el Ejecutivo ha mantenido, de la misma forma, reuniones con la Secretaría de Estado vaticana en orden a conocer posturas y negociar la presencia de la Iglesia en el proyecto que presentan de resignificación de cuanto hay en el Valle.
La Iglesia ha defendido la presencia de la comunidad, la no desacralización de la basílica y la pervivencia de la presencia cristiana. Previamente, el pasado mes de julio fuentes del Ejecutivo avanzaron a Europa Press que negociaban con el Vaticano la salida de los benedictinos del Valle de Cuelgamuros para finales de 2025, aunque reconocían la dificultad de llevar a cabo esta operación si los monjes se oponían.