Dos españoles recorren más de 800 km en silla de ruedas para pedir al Papa más investigación de las enfermedades raras
800 kilómetros en silla de ruedas: la cruzada de dos españoles para encontrarse con el Papa
Dos españoles recorrieron 800 km hasta Roma en silla de ruedas para dar visibilidad a las enfermedades minoritarias
Viajar con tus propios medios nunca había tenido tanto sentido: José Ignacio Fernández y Rubén Zulueta decidieron peregrinar desde Vitoria hasta el Vaticano en sus sillas de ruedas para reunirse con el Papa y concienciar sobre las enfermedades raras que más de 70 millones de personas padecen.
Según cuenta Europa Press, José Ignacio, que padece una distrofia muscular, declaró que: «Teniendo en cuenta que el Papa, posiblemente sea la persona más relevante del planeta Tierra, consideramos que es el idóneo para representar a los 70 millones de personas que padecen enfermedades minoritarias en el mundo».
Estos dos amigos ya tenían el entrenamiento y la experiencia de hacer largas distancias en silla de ruedas: entre otras cosas, hicieron el Camino de Santiago desde Roncesvalles en 2019, cruzaron el desierto de Los Monegros y dieron la vuelta al País Vasco. Sin embargo, este año decidieron viajar a Roma con el objetivo de reunirse con el Papa para describirle la realidad de las personas que, como ellos, padecen enfermedades degenerativas. Por ello, partieron el pasado 6 de junio desde Vitoria con la ayuda de su amigo Antonio, que les seguía con una furgoneta a varios kilómetros de distancia y que fue imprescindible para ayudarlos en los posibles problemas que pudiesen tener, como José Ignacio, que según explica Europa Press: «ha afirmado que ha tenido que enfrentarse a distintos problemas en las vías, como encontrarse de pronto con una riera o quedarse embarrados y tener que quitar el fango de las ruedas de sus sillas con sus propias manos para poder seguir adelante».
A pesar de todo, después de 14 intensos días de viaje concluyeron su peregrinación con la llegada a la plaza de San Pedro y el encuentro con Francisco que, como afirma Europa Press, «ya tenía constancia, gracias al obispo de Vitoria, Juan Carlos Elizalde, del objetivo de su asociación «CAminus», con la que contagian una actitud positiva a todas aquellas personas que estén atravesando un mal momento sin dejar de poner el foco en las enfermedades minoritarias para poder recaudar fondos que aceleren su investigación».
