El secretario de Estado Vaticano, Pietro Parolin, en una foto de archivo
El cardenal Pietro Parolin desmiente los rumores sobre una posible renuncia del Papa: «Rotundamente no»
El secretario del Estado del Vaticano, quien se encontró con el Santo Padre hace una semana, destacó que «le encontré mejor que la primera vez»
El secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, desmintió rotundamente los rumores sobre una posible renuncia del Papa Francisco. En declaraciones a la prensa, que recoge en un video la televisión italiana Tv2000, al salir de un encuentro en la embajada de Marruecos en Roma con motivo de la ruptura del ayuno del Ramadán, Parolin fue claro al afirmar: «Rotundamente no» cuando se le preguntó sobre la posibilidad de que el Papa dejara el Pontificado.
El purpurado, quien ha tenido la oportunidad, junto a su sustituto, el cardenal Peña Parra, de encontrarse en varias ocasiones con el Papa en la planta décima del hospital Gemelli, explicó que las valoraciones sobre la salud de Francisco deben basarse únicamente en los informes médicos oficiales. «Son ellos [los doctores] los que nos dicen exactamente las condiciones del Papa», señaló Parolin.
El cardenal secretario de Estado, quien se reunió con el Santo Padre hace una semana, destacó que «lo encontré mejor que la primera vez», pero que es solo «una valoración externa».
Los medios, a su vez, aprovecharon la ocasión para preguntarle sobre estos encuentros que mantiene con Francisco, a lo que Parolin indicó que, dada la situación actual, «no se dan conversaciones profundas», sino que se presentan diversos temas y problemas «que necesitan una solución y el Papa da sus indicaciones».
Una lenta y prudente mejoría
La salud del Papa sigue estando en el centro de atención de los medios tras su hospitalización el 14 de febrero en el hospital Gemelli de Roma debido a una infección que derivó en una neumonía bilateral.
Aunque Francisco ha atravesado varios momentos críticos en las últimas semanas, estos no se han vuelto a repetir, y los últimos partes médicos ofrecen cierta esperanza sobre su estado de salud, ya que señalan «leves mejorías» gracias a la fisioterapia respiratoria y motora.
Según fuentes vaticanas, los médicos han constatado que el Papa requiere menos flujo de oxígeno en su tratamiento y, para pequeños traslados dentro del hospital, ya puede prescindir de las cánulas nasales. Sin embargo, su recuperación sigue siendo lenta y no se prevé un alta hospitalaria en el corto plazo.
