Enantyum está prohibido para niños, adolescentes y la mayoría de embarazadas
Qué debes saber antes de tomar Enantyum
Este fármaco es un antiinflamatorio no esteroideo con acción analgésica
El dexketoprofeno, comercializado en Europa bajo la marca Enantyum, es uno de los fármacos más vendidos en nuestro país. Se trata de un antiinflamatorio no esteroideo con acción analgésica y está recomendado en el tratamiento sintomático de dolor agudo. Es parecido al ibuprofeno, con la salvedad de que este también se puede aplicar por vía intravenosa.
Este medicamento está prohibido para niños, adolescentes y la mayoría de embarazadas. Los expertos piden al resto de la población consumirlo con moderación y solo en los casos realmente necesarios, así como bajo la prescripción de un médico.
Y es que el uso inadecuado de esta pastilla puede causar complicaciones digestivas, gástricas, cardiovasculares, renales, hepáticas o hematológicas, tal y como advierte la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS).
Este organismo no recomienda tomar este antiinflamatorio si se encuentra en alguno de los casos abajo mencionados.
no tomar enantyum si:
- Es alérgico a dexketoprofeno o a alguno de los demás componentes de este medicamento.
- Es alérgico al ácido acetilsalicílico o a otro medicamento antiinflamatorio no esteroideo.
- Tiene asma o ha sufrido ataques de asma, rinitis alérgica aguda, pólipos nasales, urticaria, angioedema o sibilancias en el pecho tras haber tomado ácido acetilsalicílico u otros antiinflamatorios no esteroideos.
- Ha sufrido reacciones fotoalérgicas o fototóxicas durante la toma de ketoprofeno o fibratos.
- Tiene úlcera péptica, hemorragia de estómago o de intestino o si ha sufrido en el pasado hemorragia, ulceración o perforación de estómago o de intestino.
- Tiene problemas digestivos crónicos.
- Ha sufrido en el pasado hemorragia de estómago o de intestino o perforación, debido al uso previo de antiinflamatorios no esteroideos (AINE) utilizados para el dolor.
- Tiene enfermedad inflamatoria crónica del intestino.
- Tiene insuficiencia cardiaca grave, insuficiencia renal moderada a grave o insuficiencia hepática grave.
- Tiene trastornos hemorrágicos o trastornos de la coagulación de la sangre.
- Está gravemente deshidratado debido a vómitos, diarrea o consumo insuficiente de líquidos.
- Está en el tercer trimestre de embarazo o dando el pecho.
Posibles efectos secundarios
La AEMPS recuerda que, al igual que otros medicamentos, este puede causar efectos secundarios:
- Efectos adversos frecuentes: podrían sufrirlos una de cada 10 personas y entre ellos estarían los vómitos, náuseas, dolor en el cuadrante abdominal superior, diarrea o trastornos digestivos.
- Efectos adversos poco frecuentes: afectan a una de cada 100 personas. Vértigo, mareos, somnolencia, trastorno del sueño, dolor de cabeza, nerviosismo, palpitaciones, sofocos, gastritis, estreñimiento, sequedad de boca, flatulencia, erupción en la piel, fatiga, dolor, sensación febril y escalofríos o malestar general.
- Efectos adversos raros: una de cada 1.000 personas podrían verse afectadas. Entre ellos estarían la úlcera péptica, desmayo, tensión arterial elevada, retención de líquidos e hinchazón periférica, edema de laringe, pérdida de apetito, acné, sudoración, dolor lumbar, alteraciones menstruales, alteraciones prostáticas, daño de las células hepáticas o insuficiencia renal aguda.
- Efectos adversos muy raros: se dan en una de cada 10.000 personas, como la reacción anafiláctica, úlceras, dificultad en la respiración, taquicardia, tensión arterial baja, inflamación de páncreas, visión borrosa, zumbidos en los oídos, problemas de riñón.
La AEMPS recuerda además a los profesionales sanitarios la importancia de notificar las sospechas de estas reacciones adversas, puesto que ayudan a la actualización de la información de seguridad de los medicamentos, y a minimizar sus riesgos.
