Las lluvias hacen florecer el desierto de Atacama, el más árido del planeta

El desierto de Atacama, conocido como el más árido del mundo, se ha transformado en un paisaje de flores moradas y blancas que cubren varios kilómetros cuadrados gracias a lluvias inusuales que se han producido en las últimas semanas en esta región del norte de Chile.

Aunque este fenómeno no es del todo extraño, ya que se repite cada cierto tiempo, no se había visto en esta época desde el año 2015, sorprendiendo tanto a turistas como a residentes locales. Normalmente, este espectáculo natural ocurre en el mes de septiembre y no en pleno mes de julio.

Esta floración suele darse en primavera, pero en esta ocasión ha llamado la atención su adelantamiento, en pleno invierno en el hemisferio sur, gracias a las lluvias provocadas por El Niño, el evento climático natural que influye en el clima global. Este llamativo acontecimiento floral se suele producir coincidiendo con este fenómeno climático, ya que es el momento en el que las temperaturas son más cálidas en la región, lo que provoca una mayor evaporación y más precipitaciones.

Este episodio suele ser, como decimos, cíclico. De esta forma, atendiendo a un análisis realizado en 2022 por la Pontificia Universidad Católica de Chile, se han producido 15 eventos florecientes en los últimos 40 años.

Más de 200 especies vegetales

«Las lluvias de 11-12 litros por metro cuadrado en abril, combinadas con una intensa nubosidad baja que humedece la zona cada noche, han activado el crecimiento de estas plantas,» explicó César Pizarro, jefe de conservación de biodiversidad de la Corporación Nacional Forestal (Conaf), a la agencia AFP.

Sin embargo, aclara que este evento no debe confundirse con el famoso «desierto florido» que ocurre en la primavera austral. Mientras que el desierto florido puede extenderse por unos 15.000 kilómetros cuadrados, las flores actuales cubren una área mucho más reducida, de entre 300 y 400 km².

En el desierto florido en su máximo esplendor, más de 200 especies vegetales florecen. Actualmente, la «pata de guanaco», una flor morada que requiere poca agua y prefiere suelos arenosos, es la especie predominante. Los científicos, pese a los indicios, aún no han determinado si este fenómeno está directamente relacionado con el cambio climático o con los fenómenos de El Niño o La Niña, según explicó Pizarro.

Los expertos consideran que los florecimientos en el desierto chileno permiten analizar los desafíos que la humanidad podría enfrentar si las condiciones extremas de baja precipitación y altas temperaturas se replican en otras partes del mundo.

Protección de las floraciones

Los meteorólogos avanzan que se esperan más lluvias en los próximos días, por lo que estas flores moradas y blancas podrían extenderse aún más por el desierto chileno. En 2022, el gobierno del país ya anunció la creación de un nuevo parque nacional en Atacama para intentar proteger estas floraciones junto con su vida silvestre, donde se incluyen insectos, reptiles y aves.

No obstante, las llamativas imágenes han ejercido de efecto llamada para turistas y residentes, haciendo que el desierto se llene de personas que quieren inmortalizar el momento y encontrar la mejor foto para sus redes sociales. Muchas de ellas lo hacen sin respetar el medio, pisando las plantas, lo que puede hacer que desaparezcan antes de lo que deberían si se acude en masa a ver esta rareza en primera persona.