
Impresión artística de un núcleo activo de galaxia
Ciencia
Investigadores del CSIC descubren un nuevo avance en enormes agujeros negros que desafía lo conocido hasta ahora
Los núcleos galácticos activos son regiones ubicadas en el centro de algunas galaxias, donde un agujero negro supermasivo emite una enorme cantidad de energía
Un estudio coliderado por el Instituto de Astrofísica de Andalucía, dependiente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (IAA-CSIC), ha descubierto una aceleración en los chorros o jets que se forman en los agujeros negros supermasivos que desafía las predicciones teóricas, revelando desviaciones respecto a los modelos establecidos.
El hallazgo se basa en observaciones del Telescopio del Horizonte de Sucesos (EHT), cuya alta resolución ha permitido «analizar los chorros a una distancia sin precedentes de los agujeros negros supermasivos en los núcleos activos de ciertas galaxias», según ha detallado el IAA-CSIC en una nota de prensa este lunes.
Los núcleos galácticos activos (AGN, por sus siglas en inglés) son regiones ubicadas en el centro de algunas galaxias, donde un agujero negro supermasivo emite una enorme cantidad de energía al alimentarse de la materia circundante.
Durante décadas, el estudio de los AGN ha sido clave para comprender los procesos físicos extremos que ocurren cerca de estos agujeros negros, incluidos los chorros o jets que lanzan hacia el espacio.Recientemente, un equipo internacional liderado por personal científico del IAA-CSIC y del Max Planck Institute for Radio Astronomy (MPIfR), en Alemania, ha demostrado que el modelo teórico actual no logra explicar completamente lo que ocurre en las regiones cercanas al agujero negro, donde se forman estos jets.
«El modelo básico no puede ser una descripción perfecta para todos los chorros; lo más probable es que sólo lo sea para una pequeña fracción», ha afirmado el investigador del IAA-CSIC, Jan Röder, y líder del trabajo. «La dinámica y la subestructura de los jets son complejas, y los resultados observacionales pueden verse afectados por degeneraciones astrofísicas», ha añadido.
El trabajo, publicado en la revista científica Astronomy & Astrophysics, se apoya en el uso de observaciones en múltiples longitudes de onda de AGN para estudiar cómo los agujeros negros lanzan los jets relativistas.
Las 16 fuentes fueron observadas en 2017. «La resolución extrema alcanzada por el EHT permitió estudiar los jets más cerca que nunca de los agujeros negros supermasivos en el centro de estas galaxias», ha apuntado Röder. El equipo ha investigado la aceleración y magnetización de los jets al comparar los resultados obtenidos a diversas frecuencias y escalas angulares.
Para entender la compleja física de los potentes chorros de plasma que emergen de los agujeros negros supermasivos en los núcleos activos de galaxias y se extienden miles de años luz en el espacio intergaláctico, son necesarias observaciones con una resolución angular extrema. Esto permite a los astrónomos estudiar de cerca la región donde se forman estos jets.
El modelo más común, asume que los jets tienen forma de cono y contienen plasma que se desplaza a una velocidad constante. Además, se cree que la intensidad del campo magnético y la densidad del plasma disminuyen a medida que nos alejamos del agujero negro que los genera.
«Utilizando la muestra de 16 AGN, pudimos obtener una perspectiva más amplia sobre el comportamiento de los chorros, en comparación con la mera observación de los objetos individuales. De este modo, los resultados son menos propensos a la influencia de sus respectivas propiedades únicas», ha señalado el colíder del proyecto en el IAA-CSIC, Maciek Wielgus.
De esta comparación, fue posible inferir la evolución de los jets desde cerca de su origen, hasta muchos años luz en el espacio interestelar. «Observamos que el brillo de los chorros suele aumentar a medida que crece la distancia al agujero negro, lo que sugiere claramente una aceleración», ha indicado el investigador del IAA-CSIC.