El poeta Miguel Hernández
El premio Miguel Hernández de poesía y la falsa acusación de la izquierda a Vox que ya ha quedado demostrada
El galardón internacional que se entrega en Orihuela nunca ha dejado de concederse, a pesar de la prórroga, no la suspensión de la que acusaban al partido de Abascal, por falta de dinero
Dijo la izquierda en bloque, en los tiempos en que era preceptivo en sus consignas atacar las consejerías autonómicas que Vox había obtenido tras su acuerdo con el PP, que los de Abascal habían quitado la subvención al Premio Miguel Hernández de Poesía.
Eran los tiempos de la censura de la ultraderecha que vociferaban los abajofirmantes habituales para convertir una situación administrativa en una consigna ideológica. Lo habitual. Fue la mentira de Goebbels, repetir mucho para construir una verdad.
Lo dijo el Gobierno, lo dijo Urtasun y los dijeron todos los apoyos de la «cultura». pero no era cierto por mucho que se repitiese, y bien que se repitió. Vox nunca retiró aquella subvención, como dijo Joaquín Robles, portavoz de Vox en la Comisión de Cultura del Gobierno, a El Debate.
Lo que sucedió en en el Ayuntamiento de Orihuela es que el consistorio no tenía dinero y la subvención se aplazó, con tiempo aún para su concesión, para destinarlo a otros temas más acuciantes. El aplazamiento no es suspensión, sino medida.
«Se retuvo la subvención hasta que el Ayuntamiento tuviera liquidez. El ministro nos acusa de ejercer la censura contra Miguel Hernández, ¿pero qué vamos a tener nosotros en contra de Miguel Hernández? Todo lo contrario. Pero se aferran a esto...», aseguró Robles.
Ayer se supo que el concejal de Cultura de Vox en la localidad alicantina, Gonzalo Montoya, había aprobado la concesión de la subvención directa nominativa por un importe de 12.020 euros para la Fundación Cultural Miguel Hernández, con motivo de la organización del Premio Internacional de Poesía Miguel Hernández correspondiente al año 2024.
El ruido ya había quedado disipado con la concesión de la aportación incluso en los tiempos de la polémica que nunca debió de existir. Hasta que se disipó y hasta que ha terminado de disiparse con la normalidad presupuestaria, sin ninguna prórroga (no suspensión) como la mencionada de 2023, la izquierda trató de hacer calar por todos los medios una mentira para apuntalar su discurso falso contra la «ultraderecha».
