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Qatarí que te viTomás Guasch

Bellingham fue Mozart. Y Rodrygo, Salieri sin envidias

¿Es mejor no jugar que seguir haciéndolo? Está en debate: no me convencerán que es bueno jugar cada tres días. Dios dirá

Actualizada 00:37

Goleó el Madrid. Normal. Era un trámite que no podía fallar, la diferencia es tanta que resultaba imposible el tortazo. De diez veces, ganaba, y goleaba, en doce. Su cruz fue el partido que perdió en casa con uno de los equipos más flojitos del Milán en su rica historia. Eso le puede dejar fuera de los ocho primeros, los que pasarán a octavos. Sí, este Milán está entre los de cabeza. «Fúmbol es fúmbol», diría Boskov.

La nueva Champions no me entusiasma. Lo que peor llevo es que no juegas contra los mismos equipos. Los calendarios de PSG y Brest, dos franceses, son de dos competiciones distintas. La novedad, excitante eso sí, es que la última jornada será de locos. Todos a partir de las 9 la noche del día 29.

Antes la jornada final tenía mucho de trámite e íbamos de cabeza al bombo. Hasta el nuevo invento mandó una sentencia de Johan Cruyff: «la Champions empieza en cuartos». Ahora, veremos. En este momento, el Madrid jugaría el cruce contra Celtic de Glasgow o Juventus. Los que miran más lejos ven a Liverpool o Barça en el horizonte. Todo puede cambiar, claro. Pero no esperen que tantísimo.

¿Es mejor no jugar que seguir haciéndolo? Está en debate: no me convencerán que es bueno jugar cada tres días. Dios dirá. Eso pensará Guardiola, que se puso 0-2 y en media hora la hicieron cuatro en el partido de la jornada. Irreconocible City. Súper meritorio el PSG de Luis Enrique. Los ingleses recibirán al Brujas, ganando clasifican. ¿Sí? Suponemos.

Estábamos donde estábamos, con el Madrid digo. Arriba es terrible, lo de atrás sigue dando de qué hablar porque no siempre estará delante el Salzburgo ni cosa parecida. Ha encajado gol en todos los partidos europeos. Miau.

Las bajas de Carvajal y Militao son terroríficas. Esta vez descansó Lucas y el lateral fue Valverde, pasará más veces. Con Modric y Ceballos juegas, pero no robas. El problema del Madrid es el orden, la organización defensiva. Se notó hasta el 1-0.

Si es capaz de apañarlo, si Alaba, qué pierna izquierda tiene, diera un salto, si Mendy volviera a ser el muro de antes… A ver Camavinga y Tchouaméni. Ese es el problema del Madrid pensando en noches grandes, hay precedentes.

Lo de arriba es extraordinario. Llegó el Salzburgo y Bellingham fue Mozart. Otro partido en plan pequeño Di Stéfano. Rodrygo, Salieri sin envidias. Rodrygo es el amigo de todos. Ese que necesitas cien euros y los tiene para ti. Fantástico. Vinicius volvió a ser amonestado y no jugará en Brest y hay que ganar. Demasiadas tarjetas, hermoso. Le dieron el MVP y estuvo torero: «incluso cuando juego mal me premian», dijo. Exigente consigo mismo sí es.

Ancelotti pudo hacer los cinco cambios, fíjense si la noche fue plácida. Lo de atrás pensando en las grandes citas: esa la cuestión. Desde que cayeron los que cayeron. El remedio es complicado.

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