
Jorge Buxadé, en la sede nacional de Vox, en Madrid
Entrevista | Candidato de Vox el 9-J
Jorge Buxadé: «Somos el partido más europeísta. Europa será más fuerte cuanto más fuertes sean sus naciones»
El candidato de Vox considera que el PP y el PSOE solo han hablado de «cuestiones internas» porque «no pueden dar explicación de haber votado lo mismo el 89 % de las veces en Bruselas»
Jorge Buxadé vuelve a encabezar la lista de Vox al Parlamento Europeo. Atiende a El Debate unas horas antes de que acabe oficialmente la campaña para unas elecciones que el partido ve como cruciales y como una oportunidad para cambiar el rumbo de la Unión Europea.
Asegura que este 9 de junio hay mucho en juego y dibuja dos opciones: «seguir con la coalición PP-PSOE a las órdenes de Von der Leyen, ejecutando la Agenda 2030» o la «alternativa» de Vox y sus aliados europeos que propone «empezar a trabajar en una propia agenda europea que tenga en cuenta las necesidades de los nacionales de cada una de las naciones europeas».
–¿Cómo llega Vox al cierre de campaña?
–Llegamos muy fuertes y muy ilusionados. Creo que la campaña de Vox ha sido extraordinaria y debo felicitar a todos los equipos provinciales porque se han implicado. Lamento que el PP y el PSOE hayan dedicado estos 15 días a hablar cero de Europa y a hablar solo de las cuestiones más internas. Supongo que es porque no pueden dar explicación de haber votado lo mismo el 89 % de las veces en Bruselas.–¿Qué es lo que más destaca de la legislatura pasada, la primera en la que ha estado Vox en el Parlamento Europeo?
–Lo que más destaca es Von der Leyen. Ha sido un ejemplo de la estafa política, porque, siendo la líder del PP Europeo, ha ejecutado las políticas más izquierdistas, de la historia de la Unión Europea. La aprobación del Pacto Verde y de todas las normas que han surgido de ese Pacto Verde han sido devastadoras para la economía de todos los países europeos, pero muy especialmente de los del sur.
Creo que es lo más lo más llamativo, cómo durante estos cinco años Europa no ha sabido afrontar ni uno solo de los problemas y de los retos que tenemos: por un lado, que nuestra economía compita con la economía americana y con la economía china o india, y segundo, la incapacidad de resolver este problema social derivado de la inmigración ilegal. La legislatura ha terminado con este pacto a favor de la inmigración que votaron PP y PSOE y que no resuelve ni uno solo de los problemas. La prueba es que en España han entrado 21.000 inmigrantes ilegales en lo que va de año.
–¿Y del paso de Vox por la Eurocámara?
–Yo creo que hay tres cuestiones, las más importantes. La primera, una estratégica, que es que la delegación de Vox en Bruselas ha sido la responsable de canalizar esas alianzas políticas con partidos de toda Europa, como se vio en el pasado Vistalegre el 19 de mayo, no solo con los partidos de nuestro grupo Conservadores y Reformistas, sino también con otros partidos que están en otros grupos o incluso que no tienen afiliación política, como Fides.
La aprobación del Pacto Verde y de las normas que han surgido de él han sido devastadoras para la economía de todos los países europeos
Luego destacaría nuestra defensa inquebrantable de los intereses de los españoles. Votamos en contra de la ley europea del clima, en contra del Pacto Verde y votamos en contra de todos los documentos del pacto de inmigraciones en el que perjudicaban a España. Algo que no pueden decir el PP ni el PSOE ni por supuesto la izquierda radical, que ha votado sistemáticamente a favor de los poderosos. Y el tercer asunto, a través del trabajo fundamentalmente de Hermann Tersch, hemos usado la delegación de Vox en Bruselas para fortalecer las alianzas políticas con los países y los partidos de Hispanoamérica, y explicar la realidad española y la realidad americana a diputados del centro de Europa, que tienen un gran desconocimiento. Eso es lo que queremos que sea España, ligazón entre Europa y América.
–Vox defiende naciones soberanas y libres dentro de Europa. Sus críticas a la deriva de la UE han llevado a que se les tilde de euroescépticos o antieuropeístas. ¿Cómo se conjuga una Europa fuerte con naciones fuertes y con soberanía?
–Somos el partido más europeísta, en el buen sentido del término. Europa son sus naciones. Todo aquel que pretenda construir una UE en la que las naciones desaparecen, sus Estados miembros desaparecen, todo el poder está en Bruselas y no en los parlamentos nacionales, es antieuropeo. Por eso creemos que Europa será tanto o más fuerte cuanto más fuertes sean sus naciones.
Lo cierto es que la Comunidad Económica Europea, donde imperaba la regla de la unanimidad, funcionó muy bien y fue un modelo de éxito. Sin embargo, cuando se crea la UE, la regla de la unanimidad de los Estados miembros va perdiendo fuerza en favor de la mayoría, es cuando Europa ha ido encadenando una crisis detrás de otra. Creo que la regla de la unanimidad es la clave del éxito de lo que fue la Comunidad de Estados de Derecho. ¿Estamos todos de acuerdo? Avanzamos. ¿No estamos de acuerdo? Seguimos hablando hasta poder llegar a un acuerdo o en su caso, mantenemos nuestras políticas.
Ese es el modelo de Europa que queremos, una Europa que trabaje por la prosperidad, por la riqueza económica, por la libertad de empresa, que proteja la economía europea frente a la competencia desleal de la producción extranjera...que sea un espacio de libertad. Ahora se ha convertido en espacio de libertad para los narcotraficantes, los delincuentes y los fugados como Puigdemont o para la inmigración ilegal.
–La inmigración ilegal ha sido eje clave de Vox en esta campaña. ¿Cuáles serían las medidas que habría que acometer con más urgencia?
–Lo más importante es derogar el pacto de inmigración en todas aquellas medidas que favorecen la inmigración ilegal. Lo segundo, firmar acuerdos con los países de tránsito – Marruecos, Mauritania, Argelia, Túnez– para que acepten la devolución de todos los inmigrantes ilegales en Europa. Y en tercer lugar, poner fin a todas las medidas que suponen un efecto llamada a la inmigración ilegal. Por ejemplo, prohibir las regularizaciones extraordinarias de inmigrantes ilegales. En Europa están muy preocupados por lo que votaron PP y PSOE en el Congreso, porque una vez regularizados los 500.000, ya pueden transitar por el espacio europeo. Y acometer una reforma que es absolutamente necesaria, que las ayudas se entreguen con prioridad a los nacionales europeos o a los extranjeros que residen legalmente.
–¿Por qué Vox está en contra de la Agenda 2030?
–Porque es fundamentalmente antidemocrática. Es un documento que no es obligatorio, pero que se firmó por Mariano Rajoy en el año 2015 sin decírselo a ninguno de los españoles ni someterlo a un debate y a una votación en el Congreso, y que pretende marcar la política de todos los Estados desde el año 2015 hasta el año 2030. ¿Entonces no tiene ningún sentido lo que votamos los españoles cada cuatro años?
Si todos los partidos, salvo Vox, están alineados con la Agenda 2030, es evidente que entre ellos no hay ninguna diferencia. Pueden aparentar diferencias, pero en lo sustancial ejecutan esas políticas globalistas que no atienden a las necesidades de España. Es de sentido común que no puede haber una agenda universal, que las necesidades o las preocupaciones de los españoles son distintas de los ciudadanos de Mali, Ecuador o Finlandia.
La Agenda 2030 es antidemocrática. Se firmó sin someterlo a un debate ni a una votación y pretende marcar la política de todos los Estados
Además, tiene cuestiones muy perjudiciales, como la criminalización de la agricultura, de la ganadería o de la industria en los países occidentales, promueve la inmigración ilegal con alegatos a favor de los movimientos de migraciones, defiende la ideología de género o, por ejemplo, rechaza la libertad de los padres en el ámbito educativo, porque lo que promueve es una educación pública, laicista y estatalizada.
–¿Cómo cree que va a quedar el sistema de alianzas después del 9 de junio? ¿Sigue convencido de que habrá un cambio de mayorías?
–Pues deseamos y confiamos en que en todos los países de la UE los partidos conservadores tengan un gran crecimiento como el que va a tener Vox, y que con eso podamos cambiar el rumbo. La cuestión es romper la coalición entre el PP y el PSOE, obligar al PP por la fuerza de los votos a separarse de liberales, verdes y socialistas y cambiar el rumbo de los programas de la Comisión para poner en primer lugar la prosperidad económica, la protección de nuestros productores, la seguridad en las calles y, sobre todo la libertad, que está muy amenazada por las constantes restricciones y prohibiciones que vienen de Bruselas.
–Ya han dicho que no van a apoyar a Ursula Von der Leyen. ¿Qué candidato estaría dispuesto a apoyar Vox para presidir la Comisión?
–No tenemos ningún candidato a la Presidencia de la Comisión. Vamos a ver el resultado electoral y en función de eso, si el PP europeo es realmente el grupo más votado, tendrá que presentar un candidato. Nosotros hemos dejado claro que a Von der Leyen no, porque no es fiable, tiene graves acusaciones ahora mismo de falta de transparencia y de rigor en lo relativo, por ejemplo, al llamado Pfizergate, o las cuestiones relativas al escándalo sobre Catar o la influencia de Marruecos en Bruselas. Cuando haya un candidato, tendremos que ver cuál es su programa para los cinco años, y en función de eso, decidiremos el voto, siempre pensando en el interés de los españoles.