Granada
La campana que tocan los solteros el 2 de enero para contraer matrimonio en el nuevo año
Ante la avalancha de solicitudes, el Patronato de la Alhambra se ha visto obligado a poner en marcha un sistema de invitaciones online para todos aquellos que deseen subir a la Torre
Según la tradición, que se remonta a dos siglos atrás, las mujeres casaderas que hagan repicar la campana de esta torre el día 2 de enero, en caso de estar sin pareja, la encontrarán, y si ya la tienen, pasarán por el altar. Hoy día, en que tan difícil se ha vuelto encontrar marido o esposa para casarse, suben indistintamente tanto mujeres como hombres, con idea de lograr el mismo objetivo.
Es más, ante la avalancha de granadinos que quieren dejar atrás la soltería en 2025, el Patronato de la Alhambra se ha visto obligado a poner en marcha un sistema de invitaciones online para todos aquellos que deseen subir a tocar la campana de la Torre de la Vela el día 2 de enero, como manda la tradición.
El ritual es sencillo. Se trata de subir a la Alhambra, penetrar en la zona de la Alcazaba y dirigirse hasta la torre más emblemática del monumento, que antes fue también llamada Torre Mayor o Puerta del Sol. Una vez ante esta imponente atalaya de 27 metros de altura, hay que subir cautelosamente sus 52 peldaños estrechos hasta llegar a lo alto de la torre, donde habremos de tocar por tres veces de la campana, para que suene bien fuerte.
Se calcula que cada año acuden cerca de ocho mil personas, preferentemente granadinos, pero también visitantes curiosos que se acercan presurosos a cumplir con el ritual en cuanto ven el alboroto que allí se arma. En realidad, busquemos o no pareja para casarnos, lo cierto es que es el único día del año en que cualquiera puede tañer libremente una campana tan famosa como esta.
La Torre, un símbolo de Granada
La Torre de la Vela es, sin duda, uno de los símbolos más importantes de Granada. De hecho, aparece en el propio escudo oficial de la ciudad desde 1843.
Fue construida en la segunda mitad del siglo XIII, por lo que se trata de una de las edificaciones más antiguas de la Alhambra nazarí. Según la tradición, fue desde esta torre donde los Reyes Católicos enarbolaron su estandarte, el 2 de enero de 1492, para celebrar el fin de la Reconquista cristiana. Fueron también Isabel y Fernando quienes mandaron que en lo alto de la torre se colocara una gran campana que, desde entonces, se convirtió en la más emblemática de la ciudad.
Durante siglos, la campana sonaba a diario para que los granadinos escucharan sus toques regulares de Ánimas, de Queda, de Alba y de Modorra. También sirvió, hasta hace unas pocas décadas, para regular los turnos de riego de los agricultores de la Vega o para alertar sobre incendios o rebeliones populares.
La campana ha tenido que ser sustituida en varias ocasiones, al fracturarse por diversos motivos, por lo que la actual, también muy vetusta, nos ha llegado desde el lejano año de 1773.