Santuario de la Mare de Déu de Lurdes, en La Nou de Berguedà

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Familia

La diócesis de Solsona abre sus rectorías para que familias numerosas puedan ir gratis de vacaciones

Las antiguas casas rectorales de Ardèvol y el santuario de Lurdes, en la Nou, acogerán este verano una veintena de familias con tres o más hijos

Este verano, una veintena de familias numerosas podrá pasar una semana de vacaciones gratis en las rectorías de la iglesia de Ardèvol y del santuario de Lurdes en La Nou de Berguedà, dos pequeños pueblos de la diócesis de Solsona. Se trata del proyecto Vacaciones para familias, que este 2024 cumple su octavo aniversario, y que busca ofrecer un descanso a aquellos padres y madres con dificultades económicas para ir a pasar unos días de ocio con sus hijos fuera de casa.

Vacaciones para familias es una iniciativa que puso en marcha el anterior obispo de Solsona, Xavier Novell como una ayuda para apoyar a las familias numerosas. «Somos muy defensores de la familia: es el amor más especial y fecundo», destaca la responsable del proyecto, Encarna López.

Hasta el 31 de mayo

El periodo de inscripción para enviar solicitudes este verano está abierto hasta el 31 de mayo, en la web del proyecto. El único requisito que deben cumplir las familias es tener tres o más hijos, y se priorizará a las de la diócesis de Solsona y a aquellas con más necesidad económica. «Se les dará prioridad, pero no es un requisito: otros años han venido de Valencia, Murcia o Alcalá de Henares, ¡e incluso dos familias misioneras que estaban en Egipto y en Lituania, con 11 hijos cada una!», recuerda López.

A las familias escogidas en función de estos criterios se les ofrecerá una semana –de sábado a sábado, entre el 22 de junio y el 7 de septiembre– en una de las dos rectorías rehabilitadas para la ocasión. «Son entornos austeros, pero bonitos; tienen un encanto especial», señala López. La responsable del proyecto explica que estas rectorías antes vivía el sacerdote que atendía la iglesia, pero «ahora un rector lleva 10 o 15 parroquias y vive solo en una».

Testimonio para los pueblos

En las rectorías no hay tele, advierte López, pero sí un entorno natural y social muy agradecido. «Hay familias voluntarias que acogen a las que van a pasar su semana de vacaciones, tanto en la Nou como en Ardèvol», explica, y detalla que la llegada de estos visitantes es también un bien para los pueblos. «Son un ejemplo de una riqueza muy especial y un testimonio de generosidad, con niños super educados, que son felices y llenan la iglesia», apunta.

Interior de la rectoría de Ardèvol.

Interior de la rectoría de Ardèvol.Obispado de Solsona

Aunque Vacaciones para familias es un proyecto gratuito, sí se invita a los participantes a hacer un donativo. «Muchos no dan nada, otros dan unos 100 o 200 euros… y una familia el año pasado dio 450, para colaborar con el proyecto», apunta López, que recuerda que estos donativos se pueden desgravar en la declaración de la renta.

En estos ocho años, por el programa han pasado más de un centenar de familias. «Les invito a que me den su opinión, ¡y no veas!», asegura López, emocionada, y añade: «Tengo cientos de hojas donde me dicen lo bien que han estado, con dibujos de los niños, dando las gracias… Esto es lo que me anima a seguir haciéndolo».

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