Ejército del Aire  La tragedia del comandante Garvalena, un as de la Patrulla Águila

27 de febrero de 2020. Nada hacía presagiar la tragedia. Aquel día, el experimentado comandante Eduardo Fermín «Ayo» Garvalena pilotaba un avión de entrenamiento C-101 frente a La Manga del Mar Menor, en Murcia. Garvalena era un «Solo» o «Águila 5» de la Patrulla Águila. Un término que se emplea para designar la posición del piloto que vuela en solitario en las exhibiciones. Es el que lleva al avión al límite, a las maniobras más arriesgadas. El comandante se encontraba en un vuelo de entrenamiento y aparentemente todo iba bien. En ningún momento avisó de que sufriera algún tipo de avería o emergencia. De repente, la torre de control de San Javier perdió contacto con él. Según los testigos presenciales, el avión cayó en picado, no pudo recuperar altura y explotó al impactar contra el agua. El militar no logró eyectarse del aparato antes de que este se estrellara.

La tragedia tuvo un aspecto aún más doloroso. Garvalena había relevado en el puesto al comandante Francisco Marín, que falleció el 26 de agosto de aquel mismo año en un accidente similar, al estrellarse también frente a La Manga el C-101 que pilotaba. Aquel fue un año negro. El 18 de septiembre una avioneta Tamiz se había estrellado en el Mar Menor y fallecieron el comandante Daniel Melero Ordóñez, de 50 años, natural de Cádiz, y la alumna de tercer curso Rosa Almirón Otero, de 20 años, de Lucena (Córdoba).

El comandante Garvalena sumaba más de 2.300 horas de vuelo. Desde 2007 formó parte del Escuadrón 142 del Ejército del Aire, perteneciente al Ala 14. Hasta 2013 manejaba un Mirage F-1, y durante tres años voló en un Eurofighter Typhoon. Había participado en la misión de la OTAN de Policía Aérea del Báltico en Lituania en el año 2016 y en la Operación Atalanta en Yibuti en 2018, contra la piratería. Estaba casado y tenía tres hijas.

Una glorieta en Alcalá de Henares

El pasado día 7, el comandante recibió un homenaje cuando están a punto de cumplirse dos años de la tragedia. El alcalde de Alcalá de Henares, Javier Rodríguez Palacios, y el jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire, el general del Aire Javier Salto Martínez-Avial, participaron en el acto de inauguración de la nueva glorieta del Ejército del Aire Español, donde se ha instalado un avión C-101 para recordar a «Ayo' Garvalena.

La nueva glorieta está situada entre la carretera Universidad Complutense y la calle Barberán y Collar, en el acceso al barrio de Ciudad del Aire y está presidida por un avión C-101 (CASA C-101 Aviojet E.25 Mirlo, en la denominación del Ejército del Aire), cedido por el Ejército del Aire al Consistorio, según la nota remitida por el Gobierno local.

Se trata de un avión cuya entrada en servicio en España data de 1980, su principal misión es la enseñanza y es la aeronave utilizada habitualmente por los pilotos de la Patrulla Águila. Tal y como relata el Ministerio de Defensa, en el año 1975 y ante la necesidad de un nuevo reactor de enseñanza que sustituyera al T-6 (Texan), el Ejército del Aire contrató con la empresa CASA el desarrollo y la fabricación de 4 prototipos del avión C-101 Aviojet, denominado militarmente desde entonces E-25 «Mirlo». Los cuatro primeros se incorporan a San Javier el 17 de marzo de 1980.

En el emotivo acto de Alcalá de Henares participaron representantes de todos los ejércitos, los familiares del comandante Garvalena, autoridades militares, los tenientes de alcalde Miguel Ángel Lezcano y Alberto Blázquez, miembros de la Corporación Municipal, representantes de la Asociación de Vecinos de Ciudad del Aire y escolares del colegio del barrio.