La Presentación tilda de «injusta y arbitraria» la decisión de la Agrupación

La hermandad de la Presentación al Pueblo no se ha quedado de brazos cruzados después de que la junta de gobierno de la Agrupación de Cofradías decidiera en la noche del pasado miércoles no atender su solicitud de hacer estación de penitencia en cualquier día diferente al Jueves Santo, que era el inicialmente asignado.

En un comunicado, esta cofradía del barrio de Cañero responde al organismo cofrade, a la que acusa de haber actuado de forma «injusta y arbitraria», ya que «no se han atendido ninguna de las diversas propuestas que desde nuestra hermandad se han ido trasladando: el ofrecimiento de un diálogo directo -en ningún momento hemos sido citados-, la solicitud de al menos un segundo día como ha sido habitual en otras ocasiones, con un claro agravio comparativo -sin más exigencias por nuestra parte ni de horarios ni de recorridos- o el aplazamiento de la decisión de un año para realizar un estudio pausado de posibles recorridos».

También cuestionan el mencionado informe de la vocalía de estación de penitencia, «del cual desconocemos su contenido y los argumentos de dicho informe para tomar esta decisión», además de que «este órgano eclesial no haya querido valorar las razones de orden pastoral y litúrgico que se expusieron en nuestra decisión».

La búsqueda de soluciones

La cofradía de Cañero considera «preocupante» el trabajo desarrollado por dicha vocalía, puesto que «ha sido incapaz de presentar una segunda opción de recorrido, no desarrollando el cometido que le es propio: gestionar los recorridos de la carrera oficial».

Pese a este revés recibido, la hermandad de la Presentación muestra en este comunicado su deseo de «continuar manteniendo el diálogo con los responsables de la Agrupación», ya que «deseamos buscar soluciones ahora o en el futuro próximo que, a pesar de ser difíciles y conllevar nuevos estudios, garanticen, en primer lugar, que la hermandad realice estación de penitencia en la Santa Iglesia Catedral, en segundo lugar, el buen funcionamiento de toda la Semana Santa, y en tercer lugar, la vida celebrativa de esta comunidad de San Vicente Ferrer».