
Un adolescente, con las verduras de la bolsa de la compra
Descubren el nexo entre el sueño y la alimentación en los niños: los que duermen mejor, comen más saludable
Aquellos menores con dificultades para dormir tienden a tener hábitos nutricionales menos saludables
Si en algo están de acuerdo los expertos del desarrollo infantil es en que los tres pilares de los hábitos saludables son el juego, la alimentación y el sueño. Dos de ellos han sido recientemente asociados por un equipo de investigadores de la Universidad Hakkari en Turquía y el Centro Médico Asan de Seúl (Corea del Norte). Según ha descubierto su investigación, los menores que tienen mejores rutinas de descanso manejan de forma más sana su alimentación.
En esta asociación, la tercera incógnita desvelada de la ecuación es la educación. Para conducir el estudio, se contó con la participación de 80 niños turcos y coreanos de entre 10 y 18 años, a los que se ofrecieron distintas sesiones informativas sobre la importancia de la higiene del sueño. Entre las cuestiones que se trataron en estas charlas, se abordaron las conductas previas al descanso, promoción de la salud, factores personales y cognitivos que afectan al sueño, definición e importancia del sueño, alteraciones comunes, causas del insomnio y factores que influyen en la calidad del descanso.
Mejor descanso, mejor alimentación
Tres meses después, se les evaluó nuevamente a todos. Fue entonces cuando, según los datos recogidos, observaron mejoras significativas en la calidad del sueño de los adolescentes que habían recibido formación tiempo atrás. Además, vieron también cambios positivos en sus hábitos alimentarios. Esto les ha llevado a sugerir que una mejor calidad del sueño puede influir en una alimentación más saludable.
En el lado contrario, la investigación ha evidenciado una asociación entre los problemas de descanso nocturno y la conducta alimentaria de los niños. Aquellos con dificultades para dormir tendían a tener hábitos nutricionales menos saludables.El estudio, titulado, Impacto de la educación en higiene del sueño en la gestión del sueño y la nutrición en niños de 10 a 18 años, resalta la importancia de incluir programas de educación en higiene del sueño en el currículo escolar, ya que no solo mejoran la calidad del descanso de los estudiantes, sino que también tienen un impacto positivo en sus hábitos nutricionales y, potencialmente, en su rendimiento académico y bienestar general.