Cartas al director
¿Felices fiestas? Feliz Navidad
En algunos sectores de nuestra sociedad se pretende minimizar toda expresión religiosa. La Navidad está recibiendo en los últimos tiempos grandes ataques. Dos ejemplos: Santa Claus ha ocupado el lugar de Jesús niño; se sustituye «feliz Navidad» por «felices fiestas». Lo segundo suele ser propio de quienes conciben la Navidad como una simple tradición social o cultural que se concreta en un intenso consumismo. Es la Navidad consumista. Desde que los centros comerciales instalan sus escaparates navideños en el mes de noviembre mucha gente siente el deseo irrefrenable de comprar. De comprar por comprar. En esa manera de vivir la Navidad se compra regalos a todos menos al niño que se festeja. El Papa Francisco ha afirmado que «en nombre de un falso respeto ante quien no es cristiano, muchas veces se esconde la voluntad de marginar la fe, eliminado todo tipo de referencia al nacimiento de Jesús. Sin embargo, es Él quien da sentido a todo lo que celebramos».
Navidad no es la celebración de una fecha, sino de un hecho absolutamente decisivo en la historia de la salvación. El verdadero sentido de la Navidad es que Dios compartió nuestra vida humana para que nosotros pudiéramos compartir la vida divina. La Navidad con su mensaje de fe, esperanza y amor debe servir para unirnos a Dios y unirnos entre nosotros.
El nacimiento de Jesús cambió radicalmente la condición de nuestra humanidad. Desde entonces, todos somos familia de Dios e invitados a vivir como hermanos y con esperanza.