Cartas al director
Demagogia
Una vez más asistimos a la demagogia, a lo políticamente correcto, al wokismo y sobre todo al absurdo de ocultar la verdad, la coherencia y decirle al pan pan y al vino vino.
Desgraciadamente, hace unas semanas se produjo el asesinato, presuntamente, de una criatura indefensa, un bebé, en Linares, por parte del padrastro de este inocente. Con el revuelo correspondiente el suceso trascendió a nivel nacional y fue objeto de comentarios en el programa de Ahora Sonsoles. Uno de sus tertulianos, Naranjo, se «atrevió» a comentar que la madre de la criatura tenía una gran parte de culpa por haber dejado solos a sus hijos con semejante individuo con sus antecedentes. Algún tertuliano, entre ellos la conductora del programa, Sonsoles Ónega, saltaron como resortes histéricos defendiendo a la madre y censurando a Naranjo por este comentario. Por supuesto, esta madre no es la autora del crimen, pero utilizando el refranero, «quien evita la ocasión, evita el peligro». No dejes al lobo cuidando el gallinero. Naturalmente que esa madre tiene gran parte de culpa del desgraciado hecho. Y tiene que soportar, aunque no sea nada más que por conciencia su cuota de culpabilidad. Diré, y estoy bien informado, que los servicios sociales ya han separado al hijo superviviente de la madre. Y también esta pobre criatura ya ha padecido, en otro tiempo la retirada, por parte de los mencionados servicios sociales, de otros hijos. Hay informes que demuestran la incapacidad de esta mujer para el cuidado y protección de sus vástagos.
Debemos de dejarnos de demagogias impuestas por esta sociedad oficial que se niega a aceptar la realidad y crudeza de los hechos y que cada palo aguante su vela. Totalmente de acuerdo y solidario con Naranjo por su comentario coherente y real, sin prejuicios impuestos. Eso es independencia.