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La madre superiora del convento de Belorado, Sor Isabel de la Trinidad, y tres monjas del convento de Belorado salen del juzgado de Burgos

La ex abadesa del convento de Belorado, Laura García de Viedma, a la izquierda, y dos monjas salen del juzgadoEFE

La ex abadesa de Belorado ya pide donativos a su nombre

Habilita una cuenta corriente para percibir ingresos, a pesar de que el arzobispado es quien paga todas sus facturas

Las ex monjas –o, al menos, la ex abadesa– del convento de Belorado han habilitado una cuenta corriente en el Banco de Santander para recibir donativos. Lo peculiar es que la titular de la misma es Laura García de Viedma, que cuando era monja clarisa recibía el nombre de sor Isabel de la Trinidad y era la abadesa del monasterio hasta que concluyó su mandato a finales de mayo. Así se puede comprobar en las redes sociales de las ex religiosas, donde facilitan el número de la cuenta e indican que la titular de la misma es la citada García de Viedma.

Al menos 10 cuentas bancarias de las ex religiosas están intervenidas por el Comisario Pontificio designado para este asunto, el arzobispo de Burgos, monseñor Mario Iceta. El propio Comisario explicó en una rueda de prensa el pasado lunes que en ellas «había 5.000 o 6.000 euros». Eso podría explicar que las ex clarisas hayan abierto una nueva cuenta corriente a nombre de la ex abadesa, al no poder acceder a las antiguas.

El perfil de Instagram de las ex clarisas donde se piden donativos a nombre de la ex abadesa

El perfil de Instagram de las ex clarisas donde se piden donativos a nombre de la ex abadesa

Sin embargo, el arzobispado de Burgos explicó ayer miércoles en un comunicado que se está haciendo cargo de las facturas y pago de nóminas que genera el convento de Belorado y que ascienden hasta el momento a los 26.000€.

Que la nueva cuenta corriente esté a nombre de la ex abadesa podría tener su explicación en que, al no ser ya la representante legal de la comunidad de clarisas de Belorado, se habría visto obligada a personarse como persona física y no jurídica, pero esta situación abre la puerta a la incertidumbre sobre el manejo de los donativos que, eventualmente, podrían llegar a esa cuenta bancaria.

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