Remedios caseros para aliviar la conjuntivitis
Los expertos alertan sobre el falso mito de usas manzanilla para limpiar el ojo
La conjuntivitis es la inflamación de la conjuntiva, un tejido fino y transparente que cubre el interior del párpado y la parte blanca del ojo. Cuando se inflama, los vasos sanguíneos se hacen más grandes y visibles, lo que otorga al ojo un color rosado o rojizo, y puede provocar ardor y escozor; aumento de las secreciones o del lagrimeo; sensibilidad a la luz y, en ocasiones, hinchazón en los párpados.
En función de la causa, se distinguen cuatro tipos de conjuntivitis:
Conjuntivitis viral
Puede ocurrir con los síntomas del resfriado, la gripe o de otra infección respiratoria. Suele empezar en un ojo y puede pasarse al otro en pocos días. Las secreciones del ojo suelen ser acuosas.
Conjuntivitis bacteriana
La conjuntivitis bacteriana está causada por una bacteria y las secreciones son más densas. Se contagian de una persona a otra con facilidad.
Conjuntivitis alérgica
Suele afectar a ambos ojos y los síntomas son picor, inflamación y lagrimeo en los ojos.
Conjuntivitis causada por irritantes
Está provocada por una sustancia química o un cuerpo extraño en el ojo que irritan o infectan la conjuntiva. Es frecuente en verano por los cloros de las piscinas o en aquellas personas que usan lentes de contacto.
Tratamientos
Expertos del Instituto Oftalmológico Fernández-Vega, afirman que ante cualquier síntoma de conjuntivitis los ideal es acudir al médico para que identifique los primeros síntomas de una posible infección. Solo en caso de una conjuntivitis bacteriana se trata con diferentes antibióticos por medio de gotas. La alérgica y la vírica se basan en antihistamínicos tópicos y en lágrimas artificiales, o corticoide tópico.
Qué podemos hacer en casa
- Pueden usarse gotas para la conjuntivitis sin medicamento para calmar la sensación de irritación, así como limpiar las legañas en las pestañas lavando suavemente con suero fisiológico.
- Usar compresas frías y analgésicos
- Mantener los ojos limpios y no usar maquillaje que debe desecharse o lavar y desinfectar todos los utensilios de maquillaje.
- Lavar las manos antes de tocarse los ojos
- Evitar frotarlos
- Reducir la exposición al sol
- Usar gafas con filtro solar para rayos UV
- No compartir productos cosméticos, toallas o sábanas, entre otros artículos personales.
- No usar lentes de contacto. Utilice un par nuevo cuando vuelva a usar las lentillas.
El mito de la manzanilla
El doctor Tomás Parra explica en Infosalus la importancia de no dejarse llevar por mitos como la limpieza del ojo con manzanilla porque pueden empeorar la afección ocular: «Es cierto que la manzanilla tiene propiedades antiinflamatorias y analgésicas; sin embargo, no se debe usar sin la recomendación previa del oftalmólogo, porque no actúa de la misma manera al aplicarla que al ingerirla».
Resalta que los ojos son «muy delicados», y lo más probable es que la infusión de manzanilla no sea una solución estéril porque puede tener agua contaminada, por lo que se puede provocar una infección. «También es posible que altere la flora bacteriana normal de los ojos, resecarlos, o provocar una reacción alérgica. Además, el paciente no conoce a qué temperatura es recomendable aplicarla para tener los posibles beneficios en los ojos», advierte el oftalmólogo.