Raúl Asencio, canterano multiusos, titular en tres meses y hecho en La Fábrica

Se marchó Nacho, se rompieron Militao y Carvajal, Alaba continuaba entonces en proceso de recuperación y el Real Madrid tuvo que acudir a urgencias. La emergencia era poner en primera línea de combate a un canterano del filial. Hay que aprovechar las crisis para sacar buenas conclusiones. Tras el invierno llega la primavera. Y la consecuencia del problema fue descubrir que Raúl Asencio tenía madera del primer equipo.

Su progresión en 'La Fábrica' cumple el manual. Llegó a Valdebebas con catorce años, procedente de Las Palmas. Un año en el Cadete B del Real Madrid, otro en el Cadete A. Un año en el Juvenil C, otro en el B y el tercero en el A. Perfecto. En 2022 salta al segundo filial y a la temporada siguiente asciende al Castilla. En su segunda campaña con Raúl González Blanco, que dio muy buenos informes de él, es convocado por Ancelotti. Debutó en el Bernabéu inmediatamente, ante Osasuna, por la grave lesión de Militao. Se hizo de la necesidad virtud. Se ha quedado.

Al cabo de tres meses se ha ganado un sitio en el once. Ha plantado cara a Haaland y a todos los delanteros que se ha topado enfrente. Su eficacia en el marcaje, su rapidez en el corte, su carácter guerrero, su agresividad, su potencia y su determinación le han llevado a transformarse en titular en el esquema del italiano. Ha jugado de central derecho, de central izquierdo y de lateral diestro. Es un comodín de la defensa que viene bien formado de 'La Fábrica'. Ha cogido el testigo de Nacho y no pretende soltarlo.

Todos saben que Ancelotti tiene prudencia con los jóvenes y siempre tira hacia el escalafón de los veteranos. Tras la excelente irrupción de Asencio, hubo partidos en los que el técnico eligió la experiencia de Rüdiger y Tchouaméni en el epicentro de la retaguardia, aunque el francés no es un 'stopper'. El canario calentó banquillo durante unos pocos encuentros.

Cogió el liderazgo del lesionado Rüdiger

El chico se había ganado jugar, se había merecido la continuidad. La lesión de Antonio Rüdiger acabó con esa situación de vaivén. El canterano recuperó la titularidad y no la ha perdido desde entonces. Se ha labrado a pulso su protagonismo. El alemán obtuvo el alta veinte días después y Asencio compartió titularidad con 'Don Antonio'. Nadie le quitaba de la alineación. Brillante ante el Manchester City, mantuvo su puesto tras la reaparición de Alaba, que fue su compañero en el duelo con los gerundenses. Habrá partidos en los que rotará con el austríaco y el germano, pero es un fijo en la ecuación de Ancelotti.

El joven es el más fuerte

Lo está jugando todo porque acaba de cumplir 23 años y no necesita reparto de esfuerzos. Ya suma 25 encuentros y espera duplicar esa cifra. Alaba entrará paulatinamente en el once y hay que cuidar a Rüdiger, que lleva dos años sin parar y el cuerpo ya se quejó hace un mes. Raúl es la solución. Ya no es una actuación de urgencia, es una realidad confirmada.

Es un futbolista de Primera. De primer nivel. Y no solo por sus virtudes defensivas. Sus pases en largo son perfectos y ha creado jugadas de gol bien aprovechadas por Bellingham y Mbappé. Raúl González Blanco, su entrenador en el Castilla, su valedor, subraya siempre esa cualidad ofensiva del canterano.

Tal es su evolución, que Carlo piensa en él también como lateral derecho de rotación cuando recupere la dupla Rüdiger-Alaba en algunos momentos. Todos, el entrenador y la dirección deportiva, desean que el chaval pase lo menos posible en la reserva. Será central o lateral. Se está moldeando en cada partido y progresa adecuadamente. Sin prisa pero sin pausa. Minutos y más minutos para pulirle. Así se forja un jugador en el Real Madrid.

Su futuro, en verano

Es tal su rendimiento que su porvenir está encima de la mesa. Actualmente tiene contrato hasta 2025 y una cláusula de 50 millones de euros. Condiciones firmadas como futbolista del filial. Ahora toca hacerle un contrato del primer plantel.

Las partes han hablado y concretarán todo en el verano. La plantilla vive la fase decisiva de la temporada y en la casa blanca quieren que el muchacho se concentre en las cuatro competiciones que el Real Madrid tiene por delante: Champions, Liga, Copa (hoy en Anoeta) y después el Mundial de Clubes. Sus prestaciones se valorarán definitivamente en julio. Si todo va bien, tendrá un nuevo convenio por seis años. Pero las bicicletas son para el verano.

'Ahora toca jugar fuera ante la Real en Copa y ante el Betis en Liga sin descanso, con un margen de tres días'. Eso es 'lo único importante en este instante'. Y Raúl Asencio será protagonista.