Torres (Conpymes): «Yolanda Díaz estuvo en nuestra presentación y luego desapareció»

En medio del descontento generalizado del mundo empresarial con el acuerdo entre PSOE y Sumar, el presidente de la asociación de pequeñas y medianas empresas Conpymes, José María Torres, tiene en uno de sus puntos un motivo de celebración. Concretamente, el que les compromete a «desarrollar las reglas de representatividad empresarial, especialmente las relativas a la mayor representatividad de las Pymes en el diálogo social».

Un objetivo con el que precisamente nació, en 2021, la organización que preside Torres, en un acto rodeado de polémica por la presencia de la mujer de Pedro Sánchez, Begoña Gómez, y de Yolanda Díaz, lo que se interpretó como un espaldarazo del Ejecutivo a la nueva asociación en detrimento de CEOE y Cepyme. «(Yolanda Díaz) estuvo en la presentación. Y luego desapareció», argumenta Torres, en una entrevista celebrada días antes de que la vicepresidenta y líder de Sumar y el propio Sánchez anunciaran un polémico acuerdo programático rechazado por CEOE, Cepyme y ATA.

Torres también marca distancias con la catalana Pimec, cuyo presidente, Antoni Cañete, es también vicepresidente de Conpymes. «En nuestra organización hay distintas sensibilidades. No nos vamos a posicionar, ni a favor de la amnistía ni en contra. Es un tema político».

–¿A qué responde el nacimiento de Conpymes?

–Nace por la necesidad de que haya una organización de pymes y autónomos que sea totalmente independiente. Desde que España está en democracia, hace 45 años, una sola organización representa a todos los empresarios: la CEOE. Cepyme es un apéndice. Queríamos que hubiera una organización que tuviera voz propia. En España ya se da. En Cataluña está Pimec, que tiene el 50 % de la representatividad con Foment. En Baleares también, así como en Europa, por ejemplo, está Business Europe, que defiende a la gran empresa, y SME United, que defiende a las pequeñas. Hay un exceso de regulaciones y de normas porque se hacen pensando en la gran empresa. Tenemos que pensar que España ahora mismo es el 99,96 % de las empresas son pymes.

–¿Cómo es la relación con otras patronales empresariales?

–Con Pimec participamos en todas las mesas conjuntamente. A veces hay tirantez, porque al final uno defiende a los grandes y otro a los pequeños. A veces sí que coinciden los intereses no, pero otras veces no. Pero no debemos olvidar que los grandes son un motor para los pequeños y los pequeños la idea es que se hagan grandes. Nosotros vamos en línea con la SBA (Ley de las Pequeñas Empresas, una recomendación lanzada por la Comisión Europea en el año 2008). Dentro de esos diez principios está también el tema de la segunda oportunidad. Eso ha generado más de cinco millones de empleos en la Unión Europea. Pero fundamentalmente eso más que cumplir para eso, para. Para que las pymes tengan voz propia, independiente y se sigan a rajatabla los principios que marca la Comisión Europea. De hecho ahora mismo sale una propuesta de recomendación que dice que el diálogo social tiene que ser objetivo y transparente y que la representatividad se debe de contar. Es lo que nosotros pedimos en su momento al Ministerio de Trabajo y lo que nos contestaron es que la representatividad en España era por presunción. Que no se había desarrollado el reglamento para que se cuente la representatividad. Pasa igual a nivel de sindicatos. Pero nosotros no tenemos ninguna guerra.

–¿Qué representación tiene ahora mismo Conpymes?

–Tenemos organizaciones patronales, como las de Baleares o Salamanca, en diferentes puntos de España, y luego tenemos organizaciones sectoriales que son representativas en su sector. Por ejemplo, Fenadismer, que es la del transporte, ya forma parte del diálogo social de su sector. O COAG, en alimentaria, que es la primera organización en agricultura y ganadería. O UATAE a nivel de autónomos. Según el último recuento que hubo es la organización más representativa de autónomos en España. O Anpier en fotovoltaicos. Así hasta más de 50 organizaciones. Representamos a más de dos millones de empresas y autónomos.

–Que Yolanda Díaz acepte incluir a las pymes en el diálogo social, ¿implica que decaiga la demanda que presentaron contra Trabajo en la Audiencia Nacional?

–También hemos puesto una demanda al ministerio de Educación, por las subvenciones a dedo a CEOE y los sindicatos, que está en el Tribunal Supremo. Yolanda Díaz vino a Barcelona con un objetivo claro. Apoyar a los sindicatos de allí. Hacerse la foto. Con Pimec igual. Que apoyaran lo que está haciendo con el tema de la amnistía. Y luego allí sí que dijo que si había un Gobierno se iba a hacer ese reglamento en línea con lo que pide la Comisión Europea. Primero hay que ver si hay Gobierno.

Estamos con la Constitución y el Estado de Derecho

En nuestra organización hay distintas sensibilidades y dijimos que no nos íbamos a posicionar, ni a favor de la amnistía ni en contra. Pensamos que ese es un tema político. Aún no hay ningún documento para ver lo que se está proponiendo. Es un tema político y del Tribunal Constitucional. Es quien tiene que decidir si eso es correcto o no. Nosotros estamos con que no se haga nada en contra de la Constitución ni el Estado de Derecho.

–Pero Yolanda Díaz estuvo en el nacimiento de Conpymes

–Estuvo en la presentación. Y desapareció. De hecho, puedo decir que desde Pimec se le invitó estos cuatro años a ir y no ha ido nunca. Ha ido ahora porque le interesó. Pero desde que ha sido vicepresidenta no ha ido nunca. Nosotros sí que hemos tenido reuniones con ella para hablar del tema de la representatividad. También les mandamos propuestas sobre el tema del paro de los mayores de 45 años. Y se comprometió a hacer una comisión en esto. Tampoco se ha hecho nada. En la primera reunión que tuve con ella le dije «estáis haciendo toda la política para el paro juvenil, que hay menos de 200.000 personas. En parados de mayores de 45 años, estamos hablando del 60 % de los parados en España. En este tema y en el de la segunda oportunidad llevo trabajando muchísimos años. Hemos intentado dar soluciones y que hicieran cosas. Sí que pusieron que las subvenciones que se daban las bajaron de 50 a 45 años y se subió un 18 %. Pero no es suficiente.

–Se está poniendo sobre la mesa el melón de reabrir la reforma laboral para endurecer el volver a endurecer el coste del despido

–Se pide que sea reparativo. Tanto UGT como Comisiones pusieron una denuncia en la Comisión Europea sobre este tema. He preguntado sobre este tema (a Yolanda Díaz) pero aparte de la frase de que quieren aumentar el despido, no desarrolló nada más. Con lo cual nosotros de momento hasta que no veamos lo que dice la Comisión Europea… Y realmente qué es lo que están pidiendo, no tenemos posición. Ahora, en época electoral y antes de votar al gobierno, se piden muchas cosas. Nosotros lo que hacemos siempre es mirar lo que dice la Comisión Europea, porque al final es lo que va a venir estés o no de acuerdo, como con el tema de la morosidad. Lo importante es que, sea lo que sea, que no sea una cosa ambigua. Se han hecho algunas leyes, como la última que se hizo del teletrabajo, que genera mucha ambigüedad y controversia. Luego hay juicios y problemas. Debe estar muy claro el compromiso que tiene que tener la empresa y el compromiso que tiene que tener el trabajador.

–En 2017 hubo un abandono de grandes empresas de Cataluña en plena eclosión del proceso separatista. ¿Qué pasó con las pymes?

–Se fueron muchas empresas, más de 4.000. Fue un cambio de sede fiscal, más que un cambio de sede física. Muchas pymes no se fueron porque es complicado, y tienen su mercado allí. Empresas pequeñitas no se iban a ir. El grado de impacto económico que ha habido durante todos estos años, en el que sólo se ha hablado de problemas en Cataluña, pues es evidente. Aunque solo hubiera un cambio a nivel fiscal, de sede, pues también influye. Porque si antes, por ejemplo, La Caixa hacía reuniones en Barcelona y llevaba a cada mes, a 200 o 300 personas a una reunión, se beneficiaban los restaurantes, los hoteles de la ciudad. Ahora sí lo hacen en Mallorca o lo hacen en Valencia…

En Cataluña tenemos 15 impuestos más que los demás

Pero vamos, aparte en Cataluña tenemos 15 impuestos más que los demás. Yo no creo que vuelva ninguna empresa mientras gobiernen los separatistas. No solo por la parte fiscal. Yo veo complicado que ninguna vuelva. El monotema de la amnistía y el derecho de autodeterminación. Pero mientras tanto, ¿qué? Es lo que hemos dicho siempre los empresarios. Mientras no se gestiona. La economía, las empresas… Todo se ha focalizado en ese tema durante los últimos años y eso ha generado muchos problemas en Cataluña y el resto de España. Al final, de ser un motor más importante, ha ido perdiendo fuerza. Otras zonas se han convertido en más importantes que Cataluña. Y así seguiremos. Mientras sigan gobernando ellos no se va a normalizar la situación.