Fundado en 1910
Análisis económicoJosé Ramón Riera

De quién es el Banco Central Europeo y por qué España pierde peso en su capital

Nuestro problema no ha sido que nos miran mal en la UE ni el crecimiento en la población

Actualizada 04:30

No sé si muchos de ustedes serán tan curiosos como yo, aunque creo que la mayoría si, porque normalmente hay mucho movimiento en mis artículos en LinkedIn, donde todos los días los comparto, para, de vez en cuando, encontrar alguien que me da collejas, aunque la mayoría hacen comentarios muy interesantes.

Ha llegado a mis manos un informe del Banco de España que me ha permitió escribir este artículo sobre el Banco Central Europeo, de quiénes son sus dueños y de cómo cada cinco años se ajustan las participaciones.

A partir del 1 de enero de 2024 cambia la participación que cada país tiene a través de su Banco Central Nacional (BCN), que en nuestro caso es el Banco de España.

El motivo por el que cada cinco años se ajuste el nivel del accionariado viene dado porque las participaciones de los BCN en el capital del BCE se obtienen ponderando, con igual peso, la participación de sus respectivos Estados miembros en la población y en el producto interior bruto (PIB) de la Unión Europea. Los datos referidos tanto a la población como al PIB son suministrados por la Comisión Europea.

Los BCN se transferirán entre sí acciones representativas del capital hasta la cantidad que sea necesaria para garantizar que la asignación de dichas acciones corresponde a la clave ajustada.

Tras este ajuste, a fecha 1 de enero de 2024, diecisiete bancos centrales tendrán una participación en el capital del BCE mayor que en el pasado, y nueve tendrán una participación menor.

La nueva distribución de las participaciones de los BCN la vamos a ver a continuación, aunque la cifra de capital permanece invariable a todos los efectos y se mantiene en un capital suscrito de BCE 10.825.007.069,61 EUR.

Todos los gobernadores de los BCN están en el Consejo de Gobierno del BCE y tienen un derecho a voto que se distribuyen en dos grupos de acuerdo con el tamaño del sector financiero y el PIB del Estado miembro, y al variar cada cinco años se redistribuye el poder de cada país. Como resultado de los nuevos cálculos, la distribución de los gobernadores en los grupos a partir del 1 de enero de 2024 no se ha modificado.

Hasta aquí lo que he contado es simplemente lo que va a suceder en enero del 24.

Pero, si según el Gobierno de la nación, somos el país que lidera a la Unión Europea prácticamente en todo, la gran pregunta es:

¿cómo es posible que España pierda peso en la participación en el Banco Central Europeo?

España es uno de los 7 países que retrocede; no es uno de los 19 países que crece en poder.

Hemos visto 3 cosas importantes. La primera, que tiene tanto peso el crecimiento de la población como el crecimiento del PIB, y que los datos son de la Comisión Europea.

Hasta hace muy poco, toda la Unión Europea era consciente de que el gigoló que tenemos de presidente conseguía que «Ojitos tiernos» Von der Leyen tuviese un trato preferencial con «Dear Pedro».

O sea, que la razón de perder nivel de representación, aunque sea muy poco, no ha venido porque la Comisión Europea nos tenga enfilados.

A pesar de que nuestra población no crece lo suficiente como para en el futuro poder pagar las pensiones, somos el país número 12 en crecimiento de la población.

Es decir, si nuestro problema no ha sido que nos miran mal en la UE, y tampoco ha sido el crecimiento en la población, solo cabe una respuesta muy sencilla, y es que el PIB español, en términos reales, ha crecido menos que el resto de la Unión Europea.

Aquí ya no valen las chulerías de un presidente que se pone a sí mismo una soga al cuello cuando se enfrenta con Netanyahu y genera una enemistad innecesaria, o cuando se va al Parlamento Europeo e insulta al líder del Partido Popular Europeo, Manfred Weber, y le acusa de ser tan nazi como el PP español, ni cuando Marruecos se mofa de nosotros y se va a llevar la final de un mundial por la que no podremos ni luchar.

Aquí lo único que vale es que siendo de los que más crecen en población, estamos en la lista de los 7 peores países de la Unión Europea en este quinquenio junto con Grecia, Francia, Croacia, Italia, Portugal, Finlandia, Bulgaria y Suecia.

No está mal el pelotón de los torpes, 2 países que necesitaron intervención (Portugal y Grecia), los dos países que más problemas de deuda tienen junto con España (Francia e Italia), dos países nórdicos despistados (Finlandia y Suecia) y Bulgaria.

Ya sé que la Sra. Calviño se está despidiendo de todos nosotros para irse a un gran puesto en la Unión Europea, pero su legado es el que es. Nos deja en la Unión Europea en una posición mucho peor que nos encontró, como lo demuestra también que seamos uno de los perdedores en el nivel de participación en el Banco Central Europeo.

Porque los ganadores tienen nombre y apellido: Irlanda, con un 0,4039 % más de importancia, y Alemania, con un 0,3355 %.

Supongo que ahora entendemos que cuando el Bundesbank, con un 21.7749 % de las acciones del Banco Central Europeo, pide algo, Christine Lagarde no pare de correr para satisfacer sus demandas.

comentarios
tracking