Trabajar hasta los 71 años o trabas a la jubilación anticipada: así te afecta la propuesta del Gobierno
El Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones ha presentado una propuesta de jubilación parcial, una medida que busca aliviar la presión sobre las arcas públicas pero que se ha encontrado con el rechazo de patronal y sindicatos, que la califican de «recorte de derechos».
La jubilación parcial actual permite compatibilizar un contrato de trabajo con la pensión en relación inversamente proporcional, con relevo o no. En el caso de la jubilación parcial anticipada, el Gobierno pretende que se pueda pedir con dos años de antelación como máximo y endurecer la normativa actual de manera que el trabajador no pueda acumular la jornada –que le permitiría retirarse antes con la pensión completa– y que se revise el periodo mínimo exigido de cotización, en este caso de 33 años.
El Ejecutivo quiere que los interesados tengan que haber cotizado los seis años anteriores a la solicitud y que dos de ellos se haya trabajado por cuenta ajena y no por cuenta propia.
Para el caso de que se realice un contrato de relevo, la base de cotización de estos trabajadores aumentará hasta el 75 % de la base de cotización del pensionista en lugar del 65 % actual.
UGT ha calificado este punto de «oportunidad perdida» para el «rejuvenecimiento de las plantillas y la salida flexible, pausada del mercado de trabajo». Por su parte, CCOO ha apuntado que, «aunque tiene algunos elementos interesantes», otros «directamente disminuyen los derechos de acceso a esa regulación y generan elementos de penalización que no compartimos».
Jubilación activa y flexible
Pero las mayores críticas se han producido en lo que respecta a la jubilación activa. Esta modalidad se aplica un año después de haber cumplido la edad de jubilación y permite compatibilizar el trabajo a tiempo completo o parcial, como por cuenta propia con una cuantía de hasta el 50 % de la pensión, que puede alcanzar el 100 % en los casos de trabajadores por cuenta propia que acrediten tener contratado, al menos, a una persona por cuenta ajena.
La idea del Ministerio es eliminar esa condición al tiempo que reduce el porcentaje de la pensión al 30 % el primer año; el 40 %, el segundo; el 50 %, el tercero; el 75 %, el cuarto; y el 100 % a partir del quinto.
Esta decisión ha sentado muy mal entre los autónomos, que copan el 80 % de este tipo de jubilación según datos de ATA. «Que haya que esperar a que el trabajador cumpla 71 o 72 años para cobrar el 100 % de la jubilación activa es un recorte de derechos. Ni es progreso ni es propio de un gobierno progresista».
Otro punto que incluye la reforma es que los trabajadores podrán percibir el complemento por prolongación de vida laboral que incluye un 4 % adicional sobre la cuantía de la pensión correspondiente o una cantidad fija que se abona cuando decide retrasar la jubilación. De esta manera, desaparecería la jubilación flexible ya que quedaría cubierta en el nuevo marco de compatibilidades.