Embalse del Guadalmellato

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El Guadalmellato duplica el agua embalsada en un año

El embalse de San Rafael de Navallana se encuentra al tope de su capacidad

Hace ahora justo un año el embalse del Guadalmellato tenía la mitad de agua de la que almacena en la actualidad, que prácticamente roza la totalidad de su capacidad. Los 144,963 hectómetros cúbicos que contrastan con los 75, 459 que tenía el 19 de marzo de 2024, por lo que en todo este tiempo transcurrido ha doblado su almacenamiento.

La recuperación de ese pantano comenzó poco después de la cifra dada de hace un año. La última Semana Santa fue un periodo en el que prácticamente llovió todos los días y algunos de ellos con bastante intensidad. Esto hizo que el nivel del Guadalmellato subiera considerablemente y ya el 15 de abril registrara 137,694 hectómetros cúbicos tras recoger toda el agua caída en los días precedentes y alcanzar su máximo nivel en esas fechas.

A partir de ese momento comenzó un descenso en el almacenamiento hasta el comienzo del otoño, que fue cuando alcanzó su cota más baja. El 13 de octubre se redujo el volumen hasta los 105,76 hectómetros cúbicos. El inicio de un nuevo ciclo pluviométrico hizo que el Guadalmellato comenzara a recuperarse.

Pero no ha sido hasta febrero cuando el embalse ha comenzado a rozar su cota máxima de 147 hectómetros cúbicos. Las lluvias de finales de enero le hicieron alcanzar los 138,519 hectómetros cúbicos y a partir de ese momento, pese a los diversos desembalses habidos, la capacidad ha subido hasta llegar a los 145,227 hectómetros cúbicos actuales, el doble de lo que tenía el mismo día del pasado año.

San Rafael de Navallana

La evolución del embalse de San Rafael de Navallana es distinta a la del Guadalmellato. Su finalidad es la de servir de regulación, por lo que el volumen de agua almacenado en el último año no se corresponde con aquel. Aunque en la actualidad está próximo a llegar al 100 por cien de su capacidad, su fluctuación ha oscilado en la horquilla de los 54 y los 113 hectómetros cúbicos.

Al igual que le ocurriera al Guadalmellato, fue a finales de enero pasado cuando disparó el volumen del agua embalsada. El 12 de febrero registraba los 84,226 hectómetros cúbicos y el 9 de marzo, con el inicio del actual tren de borrascas ya estaba en los 92,049 hectómetros cúbicos, y ha partir de ese momento ha tenido una escalada hasta llegar a los 164,274 hectómetros cúbicos que almacena en la actualidad.

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