Ya hablan de golpe de Estado
España vive su crisis más grave desde la muerte de Franco. Mucho más grave que el golpe de Estado del 23F. Porque, frente a aquella asonada, la inmensa mayoría de los españoles se manifestaron unidos. En cambio, lo que la acción de este Gobierno está consiguiendo es la polarización del país asaltando las instituciones
El pasado martes por la noche Antonio Jiménez entrevistó en El Cascabel de Trece TV a Ramón Tamames. No creo que sea necesario a estas alturas presentar a un protagonista de nuestra vida política desde la Transición. Un hombre que empezó militando en el Partido Comunista de España, con el que fue diputado constituyente, y que acabó siendo candidato a la Presidencia del Gobierno en la moción de censura presentada por Vox en marzo de 2023.
Yo creo que las declaraciones de Tamames a Jiménez y Ana Samboal fueron la ejemplificación perfecta de la polarización a la que lleva Sánchez a España. Porque Tamames dijo con toda claridad que en esta hora en que Sánchez viola la Constitución un día sí y otro también hay que aplicar el artículo 8 de la Constitución que en su apartado 1 dice: «Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional.» Es decir, la Constitución establece la responsabilidad de las Fuerzas Armadas a la hora de defender la vigencia de nuestra Carta Magna.
Quiero creer que Tamames sólo hacía un brindis al sol porque las Fuerzas Armadas están bajo el mando del Gobierno de la nación que es quien está violando la Constitución y la única forma de que las Fuerzas Armadas actuaran sería dando un golpe de Estado que no creo que sea lo que de verdad pretende Tamames, pero sí lo que insinuó. De lo que no puede haber duda es de la degradación política que vive España para que hayamos llegado al extremo de tener que invocar a los ejércitos para que defiendan la Constitución.
Estas declaraciones de Tamames se daban en el mismo día en que el ministro Bolaños nos había tomado a todos por idiotas diciendo que la Constitución prevé la prórroga de los presupuestos. Una media verdad que es la más sutil de las mentiras. Porque la Constitución prevé la prórroga cuando no se aprueba el proyecto de presupuestos que se presente. Y en España en esta legislatura no se ha presentado ningún proyecto. Y para colmo y en la misma comparecencia la ministra Pilar Alegría nos espetó que no van a presentar el proyecto de presupuestos porque, como no tienen una mayoría suficiente para aprobarlos, sería perder el tiempo. A la basura el artículo 134.3 de la Constitución.
España vive su crisis más grave desde la muerte de Franco. Mucho más grave que el golpe de Estado del 23F. Porque, frente a aquella asonada, la inmensa mayoría de los españoles se manifestaron unidos. En cambio, lo que la acción de este Gobierno está consiguiendo es la polarización del país por medio del asalto a todas las instituciones. Como ya he dicho en otras ocasiones, sólo nos queda la Justicia y la Corona. Y ambas están asediadas desde el Gobierno que no tiene el más mínimo inconveniente en incumplir la Constitución para acrecentar sus poderes. En el caso de la Justicia eso se está haciendo pervirtiendo el sentido del Tribunal Constitucional que ahora también pretende impedir el acceso a la Justicia Europea y en el caso de la Corona impidiéndole su máxima magistratura y, cada vez más, usurpando sus funciones.