Más del 83 % de los bebés con síndrome de Down en España son abortados antes de nacer
España se ha colocado como el país donde más han aumentado los abortos de niños no nacidos con esta alteración genética
En los últimos años, han nacido un 50 % menos de bebés con síndrome de Down de los que venían al mundo antes. Este triste dato se desgrana de un estudio realizado por el neerlandés Gert de Graaf, el británico Frank Buckley y el estadounidense Brian Skotko. Según explican los investigadores, la causa se encuentra en los avances tecnológicos que han permitido detectar en más casos la trisomía 21 en el feto, al tiempo que la legalización del aborto en la mayoría de países de Europa ha convertido en la vía fácil para las mujeres acabar con su embarazo cuando se enteran.
Según sus resultados, en los países del sur de Europa la proporción de abortos selectivos fue mayor (72 %), en comparación con los nórdicos (51 %) y los de Europa del Este (38 %). Otro dato que sorprende es que España se ha colocado como el país donde más han aumentado los abortos de niños no nacidos con esta alteración genética. Se calcula que entre 2011 y 2015, el 83 % de los embarazos en este país no llegó a término.
En otras partes del mundo, como en Hispanoamérica, no se tienen los datos oficiales suficientes como para completar la investigación. No obstante, los autores del estudio, publicado en la revista Nature, han hallado una manera para hacer esta estimación. De esta manera, han concluido que en toda Europa en la última década, el 54 % de los embarazos en los que se detectaba en el feto síndrome de Down terminaba con un aborto provocado.
Hace cuatro décadas, la probabilidad de una europea de tener un bebé con trisomía 21 era de 1/800. Con el aumento paulatino de la edad en que una mujer se convierte en madre esta probabilidad subió a 1/460. Comparando los datos de hoy con los de los años 80 –cuando comenzaron a implementarse pruebas de detección prenatal– se observa una caída en el porcentaje de nacimientos de niños con Down. Según Agustín Matía Amor, director gerente de Down España –organización que recoge estas estadísticas– entre el 90 y el 95 % de los bebés con este síndrome que podrían nacer, no lo hacen.
El experto explica que la proporción de bebés nacidos con un cromosoma extra ha pasado de 1 de cada 800 en los años ochenta a 1 de cada 2.000 en la actualidad. «Es la misma ratio que tienen las enfermedades genéticas raras, es decir que, de facto, hoy tener síndrome de Down en España es considerado tan inusual como tener una enfermedad rara», denuncia Matía Amor a BBC Mundo.
Al igual que la tecnología y la ciencia ha avanzado en materia de diagnóstico del síndrome, también lo ha hecho en cuanto permitir que las personas con Down tengan una vida cada vez más larga. Su esperanza de vida ronda hoy los 60 años, más del doble que hace cuatro décadas. Vivimos una suerte de «esquizofrenia social», dice Pablo Siegrist, director de la Fundación Jérôme Lejeune en una entrevista con Mater Mundi. Explica este fenómeno: por un lado, se impulsa la integración de personas con discapacidad intelectual y por otro, se muestra como «bueno» no dejarles nacer.