
La enfermedad de Alzheimer de inicio tardío es la principal causa de demencia
El test del reloj, la sencilla prueba casera para detectar una posible demencia
Esta prueba elaborada por primera vez en 1956 ha de ser supervisada por un profesional cualificado
Sobre un folio en blanco hay una manera muy sencilla de evaluar el deterioro cognitivo de una persona. Consiste en pedirle que dibuje un círculo, que le ponga las horas y las manillas. Así es el test del reloj, una prueba muy utilizada para el diagnóstico de la enfermedad de Alzheimer y otros tipos de demencia.
Según explica Miryam Piqueras, directora del gobierno clínico de Sanitas Mayores, esta herramienta da información sobre la «percepción visual, coordinación visomotora, la capacidad visoconstructiva y de planificación y ejecución motora». A través de este simple dibujo se pueden examinar distintas funciones cognitivas, como el lenguaje, la memoria a corto plazo o las funciones visoespaciales.
Para realizar el test tan solo es necesario pedir al paciente que dibuje un reloj con todas las horas y las manecillas en una hora determinada. Esta tarea, que parece tan sencilla, requiere el uso coordinado de diferentes áreas cognitivas —«organización visual y motora, planificación y ejecución de la tarea encomendada, memoria», especifica Piqueras—. Si el dibujo no sale como debería, es decir, la puntuación de la prueba es baja, indica que hay áreas en el cerebro que no funcionan correctamente.

Dos relojes dibujados como ejemplo de la prueba
Por otro lado, también se puede proporcionar un reloj ya dibujado en otro folio para que lo copie de la forma más exacta posible. En ambos casos, si el dibujo está incompleto, si faltan las manecillas o alguna hora, se ha de preguntar al examinado si considera que el boceto está terminado antes de retirar y que puede tomarse el tiempo necesario.
«Cuanto más baja es la puntuación total obtenida, mayor es el deterioro cognitivo del paciente», incide Piqueras. Para evaluar el texto, hay que dividir la prueba en tres partes: la esfera, los números y las manillas. Su resultado final es la suma de las tres, pero según la National Library of Medicine, existen más de 15 escalas distintas para interpretar este test del reloj. Las dos más empleadas son la de Shulman, sobre seis puntos, y la Sunderland, sobre 10. En ambas, se evalúan algunos de los aspectos clave del dibujo, como si los números están bien colocados dentro de la esfera, si esta tiene forma circular o es asimétrica, o si hay errores en la posición de las manillas.
La puntuación final sirve para medir si existe alguna alteración en las funciones cognitivas y si puede haber algún indicio de que la persona padezca algún tipo de demencia. Esta prueba elaborada por primera vez en 1956 ha de ser supervisada por un profesional cualificado que tenga las herramientas y conocimientos para determinar si la persona que ha dibujado el reloj pueda sufrir algún deterioro de sus habilidades cognitivas.