Boric: entre las palabras y los hechos
Lo que queda del año 2024, será clave para el éxito o fracaso futuro del Gobierno de Boric toda vez que, el próximo año, ya es un año de elecciones presidenciales
El presidente chileno Gabriel Boric
El 25 de abril, se llevó a cabo en Chile un nuevo Encuentro Nacional de la Empresa ENADE, el cual congregó a los principales empresarios de Chile y a las autoridades de Gobierno, encabezadas por el presidente Gabriel Boric.
El mandatario chileno llegó acompañado por varios de sus ministros, intentando asignar importancia al evento, pero a su vez dando a entender la cohesión de su gabinete.
Los días previos al encuentro, estuvieron plagados de recriminaciones mutuas, en las que el gobierno acusó a los empresarios por no ceder a más impuestos y por su parte los empresarios acusaron al gobierno de excesiva «permisología» para aprobar nuevos proyectos de inversión y de una conducta anti empresa.
Todo esto, en un entorno de un grave deterioro de la seguridad interna.
En las últimas semanas Chile ha sufrido duros ataques de grupos terroristas y criminales provenientes de Venezuela, en donde el narcoestado liderado por Nicolás Maduro ampara células de delincuentes que se infiltran en distintos países de la región.
El último crimen de un carabinero chileno fue cometido por una banda venezolana de alta peligrosidad, cuyos miembros fueron apresados en Chile y posteriormente en Colombia fue detenido el autor material del asesinato.
En el encuentro empresarial, no solo se habló de inflación y de crecimiento, sino prioritariamente de seguridad con la presencia de Patricia Bullrich, ministra de seguridad de Argentina y de Iván Duque expresidente de Colombia.
El panorama de la seguridad regional es de terror, toda vez que las bandas narco están azotando a Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y Argentina.
Patricia Bullrich dio a conocer a los asistentes a ENADE, las medidas que están tomando en Argentina para combatir las bandas en la ciudad de Rosario y también entregó antecedentes de las acciones del grupo criminal Tren de Aragua» en la región, y de un fallo judicial contra el grupo terrorista Hezbolá entrenados por la guardia revolucionaria Iraní, quienes atentaron en 1994 contra la Mutual Israelita Argentina.
Por su parte el expresidente Duque, entregó su opinión respecto a las formas como se deben combatir estas bandas, desde la perspectiva de la experiencia colombiana.
El presidente Boric, intentó en su discurso acercar posiciones con los empresarios, e invitarlos a «jugar en el mismo equipo».
Para aumentar la seguridad, Boric y su ministro de hacienda Mario Marcel, apelan a más recursos por la vía de aumentar los impuestos.
Nada dijo Boric de los recursos del Estado destinados a pagar indemnizaciones millonarias a exonerados falsos tras el gobierno militar.
Tampoco se pronunció acerca de los 100 mil nuevos empleados del Estado reclutados por razones políticas y sin procesos objetivos.
Lo inexplicable es que el Estado chileno, sí tiene recursos para promover y construir nuevos memoriales para seguir promoviendo y dejando testimonios de temas de hace 50 años, con un prisma único de la izquierda.
También ha tenido recursos para entregar dineros a fundaciones fraudulentas que se han robado el dinero de todos los chilenos.
En lo referente a nuevos proyectos del Estado, existen varios hospitales públicos con obras semi abandonadas, otros terminados, pero sin equipamiento que les permita operar y otros sin personal médico disponible, especialmente en regiones alejadas de la capital de Chile.
En los paneles de discusión también se mencionó la grave crisis de la educación chilena, que impide mejoras en la productividad del país.
Lo que queda del año 2024, será clave para el éxito o fracaso futuro del Gobierno de Boric toda vez que, el próximo año, ya es un año de elecciones presidenciales y la agenda pública se va a concentrar en ese tema.
Otro tema que concentró la discusión guarda relación con un interés mayoritario por modificar el sistema político, con el objetivo de reducir el número de partidos políticos por la vía de aumentar el porcentaje de votos requeridos para poder existir.
Boric pretendía postergar esa discusión hasta no ver aprobado un nuevo «pacto fiscal» entendido como más impuestos y una nueva reforma al sistema de pensiones.
Tras ENADE, Boric y su gobierno han accedido a invertir las urgencias o al menos a tratar de enfrentar los 3 cambios de manera simultánea.
