Cargadores de coche 'Made in China' para la Guardia Civil

Durante la presentación del anuario de movilidad eléctrica 22-23 de la Asociación Empresarial para el Desarrollo e Impulso de la Movilidad Eléctrica (Aedive) se puso sobre la mesa un dato alarmante que no hace más que agrandar la chapuza de las renovables en España.

En su momento, desde El Debate se denunció que 380 vehículos de la Guardia Civil que la exdirectora María Gámez presentó en su día a bombo y platillo, apenas podían prestar servicio por la falta de puntos de carga.

Recarga

Ante estas informaciones, la Guardia Civil hizo un comunicado en el que explican que estos coches se cargan mediante «puntos habilitados, tarjetas de recarga y cargadores portátiles adaptables». También aseguraban que no había ninguno parado, negando las imágenes aparecidas en varios medios, pero justificando que «se encuentran actualmente en proceso de distribución a las unidades».

Después de que El Debate publicara fotos de vehículos oficiales recurriendo directamente a enchufes convencionales de los baños de algunos cuarteles, la Benemérita explicó que «dentro del Plan de Transformación y Resiliencia acaba de entrar en vigor un contrato, con plazo de ejecución de 9 meses, para la instalación de 1.400 puntos de recarga en toda la geografía nacional».

Según la plataforma de contratación del sector público, el pasado 31 de diciembre de 2022 se formalizó la licitación, que fue para Orange España por valor de 7.998.900 euros después de haber recibido cuatro ofertas en total.

El compromiso es el de «la adquisición e instalación de una Red de Puntos de Recarga (PdR) con Plataforma de Gestión Centralizada (PGC) para la recarga de los Vehículos Eléctricos (VE) del Cuerpo de la Guardia Civil a implementar durante los ejercicios económicos del año 2023 en las dependencias que la Dirección General de la Guardia Civil (DGGC) mantiene a lo largo de todo el territorio nacional».

Agravio

Y aquí es donde entra Aedive cuando asegura que esos cargadores no serán de fabricación española. La asociación no ha respondido a El Debate sobre los modelos y la fabricación de estos puntos de carga pero, de ser así, esa adjudicación es un agravio hacia el producto español y es una de las responsables de que el 87 % de las infraestructuras de recarga de vehículos eléctricos públicas fabricadas en España en 2022 se exportaran al extranjero.

Aedive pidió a las administraciones que pongan en valor e incentiven el producto nacional en los concursos públicos» porque calculan que en 2023 las casi 500.000 unidades de recarga que se fabriquen en España acaben en Alemania, Francia o Italia en Europa, Oriente Próximo en Asia y Estados Unidos o Canadá en América mientras España importa cargadores de Asia.