Un sencillo mando a distancia hace cambiar la luz de los semáforos
Insólito
El bulo del mando a distancia que te permite poner todos los semáforos en verde
Desde los Estados Unidos han llegado vídeos de presuntos aparatos que permiten cambiar el color de los semáforos a nuestro antojo
Quien no haya tenido prisa alguna vez mientras conduce y haya rogado al cielo encontrarse todos los semáforos en verde que tire la primera piedra.
Se trata de un problema relativamente frecuente, porque además siempre tenemos la sensación de que nos tocan todos los semáforos en rojo... además de que nuestro carril en los atascos siempre es el que más despacio avanza.
Fantasías de conductor
En este caso, desde Estados Unidos llegan estos inventos que por lo visto están bastante extendidos en aquel país, pues hay numerosos vídeos similares en redes sociales.
El supuesto mando, que ni es mando ni es nada
En los mismos, un conductor demuestra lo sencillo que es cambiar el color del semáforo por el que va a pasar con un pequeño mando a distancia que acciona con una sola mano. Pero la realidad es que todo es un engaño.
Verde que te quiero verde
Por un lado, en España la utilización de un mando a distancia así mientras conducimos puede ser considerada una infracción por la DGT equivalente a manejar un móvil, lo que ya puede costarnos hasta 200 euros y 6 puntos.
El mando de televisión que cambia el color del semáforo: ¿qué puede fallar?
Por otro lado este tipo de vídeos están más cerca de la fantasía que de la realidad. Hay uno especialmente gracioso en el que un conductor recomienda sincronizar el mando a distancia de la tele con las sirenas de las ambulancias, de manera que al llegar a un semáforo lo activamos directamente y podemos avanzar.
Mejor no picar
Bobadas de campeonato, pues si los semáforos no estuvieran sincronizados y cambiaran así de color en cuestión de segundos, asistiríamos a decenas de accidentes por minuto, pues a los coches no les daría literalmente tiempo a frenar y el resultado sería dantesco.
Una ocurrencia más en la que algunos conductores podrían llegar a caer y pagar dinero para recibir en su casa uno de estos supuestos dispositivos mágicos con capacidad para regular la circulación a nuestro gusto.
