El ocaso de un gran país

Transcurridos los últimos 6 días y después de ver, oír y leer las noticias que nos acucian y siempre atacando nuestras libertades y nuestra gran nación, ¿qué nos queda por ver y vivir?

Tenemos un Gobierno en funciones que se está vendiendo al mejor postor con tal de seguir en la poltrona de la Moncloa, Pedro I El Mentiroso y todos sus ministros y acólitos están destruyendo todo lo que nos dimos con nuestra Carta Magna y la Constitución de 1978. Están destruyendo todos nuestros valores y nuestra historia, para lograr un país empobrecido, engañado, vendido a los independentistas, separatistas, nacionalistas y liquidar todos aquellos valores patrios que, con esfuerzo, lealtad, generosidad y compromiso, nos dimos muchos de los que estamos aquí hace 45 años.

Hay una gran presión en la calle contra la amnistía que está negociando con este prófugo de la justicia de España en el maletero de un coche y ahora es «presidente Puigdemont». ¡Qué vergüenza! ¿Por qué no respeta la voluntad de la calle, de los españoles que le dicen alto y claro 'no a la amnistía'?

Solo espero y deseo que, si se llega a producir la sesión de investidura de este gran hipócrita y antipatriota, no le salgan los números y algunos de sus afines del partido tengan la honradez de abstenerse o votar en contra para que este disparate no salga adelante. Creo que se nos debe a los españoles de bien y a la institución monárquica, que nos ayudó a llegar hasta aquí en esta Monarquía democrática que nos dimos entre todos, el que este disparate de posible segundo Gobierno Frankenstein no salga adelante y vayamos a nuevas elecciones, donde todos con honestidad y lealtad votemos el modelo de gobierno que queremos y necesitamos.

¡Recapacite, Sr. Sánchez, si tiene aún algo de dignidad!