
San José, Jesús y María, obra de Joan Mayné, en Torreciudad (Huesca)
Los obispos recuerdan que el día de San José es de precepto
A pesar de ser un día laborable en casi toda España, los fieles deben acudir a misa salvo que, «por causa grave», no les sea posible
No se trata de cumplir sin más con una obligación que estipula la Iglesia, sino de honrar a San José, cuya persona y vida «tienen en la historia de nuestra salvación una importancia que ha sido reconocida siempre por la sagrada liturgia y las leyes canónicas al proponer su fiesta como día de precepto». Quien así lo ha explicado es monseñor Sebastián Chico, obispo de Jaén, que ha señalado en un comunicado que «los obispos de la provincia eclesiástica de Granada hemos acordado mantener en las diócesis respectivas el carácter festivo de este día», por lo que se considera «fiesta de precepto con la obligación de participar en la Santa Misa».
También el arzobispado de Madrid ha enviado una comunicación similar en la que recuerda que «la solemnidad de san José, patrono de la Iglesia universal, es día de precepto en toda la Iglesia». «Para favorecer la participación en la eucaristía (...), se celebrará la misa vespertina ya a partir de las 16 horas del martes, 18 de marzo», estipula. Es decir, las misas a las que acudan los fieles durante la tarde de este martes serán valederas para cumplir con la normativa. Solo «en caso de causa grave, como podrían ser los motivos laborales, no obligaría el precepto», en cuyo caso «se recomienda que las personas que estén en estas circunstancias puedan dedicar un tiempo a la oración personal o en familia».
La Iglesia católica estipula 10 días de precepto al año, además de todos los domingos:
- Santa María Madre de Dios, 1 de enero
- Epifanía, 6 de enero
- San José, 19 de marzo
- Ascensión de Jesús a los Cielos, el jueves 40 días después de la Pascua (ese domingo en algunas diócesis)
- Corpus Christi, jueves después del domingo de la Santísima Trinidad
- Asunción de la Virgen a los Cielos, 15 de agosto
- Apóstoles San Pedro y San Pablo, 29 de junio
- Todos los Santos, 1 de noviembre
- Inmaculada Concepción, 8 de diciembre
- Natividad de Nuestro Señor Jesucristo, 25 de diciembre
Las Conferencias Episcopales de cada país pueden decidir no celebrar alguno o moverlo a un domingo, pero siempre con la aprobación de la Sede Apostólica.