El cierre de la central nuclear de Almaraz «llevará a la despoblación del mundo rural»

Alrededor de 7.000 personas se han manifestado este sábado en Almaraz para denunciar el cierre de la central nuclear ubicada en el municipio extremeño de la provincia de Cáceres. Convocada por los ayuntamientos del área de influencia, la multitudinaria protesta ha transcurrido desde la plaza del Ayuntamiento de Almaraz hasta la propia central que, de seguir adelante su clausura, dejará de estar activa de forma definitiva en 2028.

A la cabeza de la comitiva que portaba la pancarta con el lema 'Sí a Almaraz, sí al futuro', se encontraba la presidenta de la Junta de Extremadura, la popular María Guardiola, junto a otras personalidades como el alcalde de Navalmoral de la Mata, Enrique Hueso, el divulgador científico Alfredo García, así como los consejeros Abel Bautista, Mercedes Morán y Guillermo Santamaría; Interior, Desarrollo Sostenible y Economía y Empleo, respectivamente.

Al inicio de la marcha, el alcalde de Belvís de Monroy y presidente de la plataforma convocante de la manifestación, Fernando Sánchez, ha asegurado que el cierre de la planta supondría «la despoblación de nuestro mundo rural» y «la despoblación sería una catástrofe». «Estamos aquí por y para los intereses de una comarca y de toda Extremadura», apuntó el alcalde de Belvís de Monroy.

Tras un recorrido en el que no se produjo ningún incidente, la comitiva llegaba a la entrada de la planta nuclear, donde se ha desplegado otra pancarta con ese lema de 'Sí a Almaraz, sí al futuro'. Además, se instaló un pequeño escenario por el que no sólo pasó Fernando Sánchez, sino también otros muchos alcaldes de municipios a los que afectaría el cierre de la central nuclear. Entre ellos, Eugenio Trebejos, alcalde de Toril; y Juan Antonio Díaz, alcalde de Almaraz.