Gastronomía
Purim, la fiesta judía en homenaje a Volodímir Zelenski
La fiesta de los supervivientes, ojalá que pronto sea más amable para los judíos de Ucrania
Fiesta judía alegre, en la que la gran protagonista es la joven judía Ester, de cuya historia hablamos en Los banquetes de la reina Ester, una fabulosa estratega.
Purim es una fiesta que dura dos días, dos jornadas de alegría y celebración por la supervivencia del pueblo judío en época del rey persa Asuero, que, probablemente, fue Jerjes I, en el s. V a.C. Sobrevivir, sobrevivir, siempre como el aceite sobre el agua, el lema del pueblo judío. Y no me tachen de hacer spoiler, todos sabemos que ellos sobrevivieron. Una vez más, y aun a pesar del sufrimiento, no fueron aniquilados.
Y con esta idea de supervivencia recordaba al presidente de Ucrania, Volodímir Zelensky, judío, incansable, luchador, líder y presidente de un país invadido. Y que lucha por la supervivencia de su pueblo con una dignidad heroica, en medio de las dificultades que, desgraciadamente, todos vemos prácticamente en directo.
Aún en tiempos difíciles, o precisamente por esto, Purim se sigue celebrando. Este año los días 16 y 17 de marzo. El primer día de Purim se preparan con ayuno y oración en recuerdo del ayuno y los rezos de los judíos que estuvieron a punto de ser exterminados por Jerjes. Y, al día siguiente, se lee el libro de Ester, especialmente a los niños, se giran matracas y se hace ruido cuando se oye el nombre del malvado Amán, que es parte de la diversión. También se hacen regalos entre amigos y se da limosna a los más necesitados.
Es una fiesta en la que los niños se suelen disfrazar, y aun también lo hacen los adultos; tiene más que ver con diversión y fiesta, con un recuerdo que con el tiempo se ha trasformado en algo alegre, que con aspectos puramente religiosos. De provocar pavor, el malvado Aman que quería aniquilar a los judíos se ha convertido en un fantoche ridículo objeto de bromas y chanzas. Un alivio.
Entre buenas comidas, risas y bromas, se refresca la historia común, se recuerdan los hechos singulares y los héroes israelitas siguen siéndolo de esta forma. Ese día se bebe alegremente, se toman dulces típicos como las orejas de Haman, una masa rellena de confituras variadas, quizás de dátil, de ciruelas y naranja o nueces.
Purim, la fiesta de los supervivientes, ojalá que pronto sea más amable para los judíos de Ucrania.