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EL ESCRITOR Y PREMIO NOVEL DE LITERATURA MARIO VARGAS LLOSA Y SU MUJER PATRICIA LLOSA URQUIRI DURANTE LA PRESENTACION DE LA OBRA "SAN FRANCISCO DE ASIS"
08/07/2011
MADRID

El escritor Mario Vargas Llosa y su segunda mujer Patricia Llosa UrquidiGTRES

Quién es quién en la familia de Mario Vargas Llosa

El escritor se ha casado en dos ocasiones y tiene tres hijos con su segunda esposa, su prima Patricia Llosa

Mario Vargas Llosa ha paladeado los sinsabores del amor de la mano de Isabel Preysler. Tras más de ocho años de relación, el Premio Nobel de Literatura y la reina de corazones han tomado caminos por separado dejando atrás una historia de amor que cautivó al papel cuché. A sus 86 años, esta no es la primera vez que el escritor peruano se enfrenta a un fracaso amoroso.

La primera mujer de la que se enamoró Vargas Llosa fue Julia Urquidi Illanes, la hermana de su tía política. Para sorpresa de los padres del literario, quienes desde el primer momento expresaron su rechazo y oposición a este romance, Mario se casó con el que llegó a considerar el gran amor de su vida con tan solo diecinueve años. Ella era la hermana de Olga Urquidi, la mujer de Luis «Lucho» Llosa Ureta, tío del peruano. Tenía diez años más que él, pero esto nunca impidió que ambos decidiesen apostar por su amor.

No obstante, en 1964 se divorciaron y, aunque al principio su relación fue buena y cordial, el hecho de que ambos publicasen novelas hablando del otro sirvió para airear sus desavenencias.

Literature laureate Mario Vargas Llosa and his wife Patricia  Llosa Urquidi during the Nobel banquet in the Stockholm Town Hall, Sweden.

Mario Vargas Llosa y su mujer Patricia LlosaGTRES

Tan solo un año después, Patricia Llosa Urquidi aterrizó en la vida del Premio Nobel dispuesta a hacerle entender que era ella y no otra la mujer de su vida. Al igual que con la anterior, con esta también compartía parentesco, pues era prima del autor y sobrina de su tía y primera esposa. Esta vez se cambiaron las tornas, era ella la que tenía diecinueve años y él diez más.

Juntos vivieron los siguientes 50 años de su vida, un tiempo en el que empezaron viviendo en Londres y más tarde en Barcelona, donde Patricia se convirtió en la secretaria y portavoz del peruano. Fruto de su relación nacieron sus tres hijos, Álvaro, Gonzalo y Morgana.

Gonzalo, Morgana y Álvaro Vargas Llosa, con su padre

Gonzalo, Morgana y Álvaro Vargas Llosa, con su padreUsuario

Con ellos el escritor mantenía una relación excepcional hasta que vieron cómo su padre decidía separarse de su madre para dar un paso más en su especial amistad con Isabel Preysler, a la que, al parecer, nunca terminaron de ver con buenos ojos. Estos decidieron posicionarse del lado de su madre, sobre todo Gonzalo y Morgana. Tanto que no tuvieron ningún reparo en cargar públicamente contra la que se había convertido en la nueva pareja de su progenitor cuando este acababa de celebrar, por todo lo alto, su 50 aniversario de boda con Patricia. Llegaron a culparla del fin del matrimonio de sus progenitores.

Se rompieron todos los lazos existentes entre el escritor y sus hijos hasta que, pasado un tiempo, se dieron cuenta de que no tenía sentido seguir enfadados y, con ello, distanciados. Terminaron asumiendo que su padre estaba enamorado y que, por tanto, no iba a romper su relación con Isabel. Aunque, finalmente, el desenlace del tan polémico romance ha terminado llegando y, al parecer, es algo ante lo que los hijos de Vargas Llosas no han podido evitar alegrarse desde el momento en el que el peruano les comunicó la noticia.

Isabel Preysler and Mario Vargas Llosa at photocall for Premiere Opera Aida in Madrid on Monday, 24 October 2022.

Isabel Preysler y Mario Vargas Llosa en el Teatro RealGTRES

El de Mario e Isabel ha sido un noviazgo intenso y discreto a partes iguales. Se conocieron cuando la socialité le hizo una entrevista para la revista ¡Hola!, pero no fue hasta casi tres décadas después cuando decidieron iniciar una relación sentimental. Corría febrero de 2015 y no fue mucho lo que tardaron en empezar a vivir juntos. Fue Mario quien se instaló en el domicilio de Isabel.

En estos ocho años, han sido muchas las veces en las que se han dejado ver juntos disfrutando de planes de lo más divertidos como viajes, citas culturales y hasta celebraciones familiares. En todas ellas, probaban lo felices e ilusionados que se seguían sintiendo, sensaciones que ahora parecen haberse esfumado definitivamente.

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