
El Juli y su mujer Rosario Domecq, en Sevilla
El obstáculo que superaron El Juli y su mujer Rosario Domecq en su historia de amor
La retirada de El Juli invita a repasar cómo es el torero cuando se quita el traje de luces
El mundo del toreo vuelve a ser noticia. Si hace unas horas nos quedábamos con el corazón en un puño al ver la tremenda cogida sufrida por Roca Rey en Santander, con Cayetano Rivera salvándole la vida y jugándose la suya, ahora es la retirada de uno de los más grandes la que ocupa las crónicas taurinas. Julián López El Juli ha anunciado este jueves su adiós a los ruedos a los 40 años de edad, después de 25 de alternativa.
El maestro de Velilla de San Antonio se ha erigido todo este tiempo como una de las grandes figuras españolas en su disciplina, pero ahora ha reorganizado sus prioridades. Una de las primeras será pasar tiempo junto a su familia, la que creó con mucho esfuerzo junto a Rosario Domecq.
La retirada de El Juli invita a repasar cómo es el torero cuando se quita el traje de luces. El suyo es uno de esos casos de personaje público que desea no serlo. Tanto su esposa como él mismo se han mostrado siempre reacios a protagonizar titulares. Ni ser noticia ni recibir un jugoso dinero a cambio de exclusivas en revistas del corazón. Eso no va con ellos.

El Juli en Las Ventas
El diestro acababa de cumplir la mayoría de edad y la joven sumaba 22 años. Ella acababa de finalizar sus estudios de Comunicación en Barcelona y trabajaba en una conocida galería de arte en Madrid.
La historia de amor de Rosario y Julián es la de dos enamorados que, como otros tantos, sufrieron la represión –en su caso falta de aprobación– por parte del padre de ella. Sin embargo vencieron todos los obstáculos y, cuando acumulaban siete años de noviazgo, tomaron la decisión de comprometerse formalmente.

La boda de El Juli y Rosario Domecq
Su boda se celebró el 20 de octubre de 2007 en la capilla de Santa Catalina del convento de Santo Domingo, en la localidad natal de Rosario, pese a que su padre no veía con buenos ojos casar a su hija tan joven. El lugar es casi de culto para la familia de la andaluza, puesto que todos los Domecq se han dado el 'sí quiero' allí desde finales del siglo XVIII.
El 6 de septiembre de 2011, el feliz matrimonio daba la bienvenida a sus hijos mellizos (Rosario y Fernando) y el 28 de marzo de 2014 hacían lo propio con su hija Isabel. Tres niños para formar una preciosa familia numerosa que siempre ha elegido estar en segundo plano, pero apoyándose en los momentos buenos y no tan buenos.
Nacida en la localidad gaditana de Jerez de la Frontera en 1978, Rosario Domecq es hija del exjugador de polo y ganadero Pedro Domecq y Urquijo y Rosario Márquez Amilibia. Desde pequeña ha mantenido una buena relación con las hijas de Bertín Osborne por parte de la madre de Alejandra, Claudia y Eugenia, Sandra Domecq Williams.
Conocida su retirada, El Juli tiene claro que ha llegado el momento de pensar en su felicidad y en la de los suyos: «No es una retirada, es el final de una etapa que por cierto ha sido maravillosa. Sobre el futuro sólo el tiempo dirá (…). Se acaba una etapa y empieza otra en la que necesito vivir muchas cosas que, debido a mi entrega a esta profesión, no he podido disfrutar, como pasar más tiempo con mi familia, gozar de mis aficiones y ver la vida desde otra perspectiva, sin la presión de mi situación, mi nombre o mi responsabilidad», ha dicho el maestro.