El primer VW Polo salió de la factoría de Landaben, Navarra, en 1984
Industria
España dice adiós a otro icono del automóvil: el coche de los niños bien que no llegaban al Golf
Pocos modelos han hecho tanto por el automóvil nacional, gracias a vehículos como este España es hoy el segundo productor europeo de coches y el octavo mundial
Tras más de 40 años en producción el automóvil español dice adiós a otro modelo que sólo puede calificarse como un mito de la automoción. Hablamos del VW Polo, un vehículo que ha sido fabricado en exclusiva durante décadas en la fábrica del Grupo VW en Landaben, Pamplona, y ahora será producido en la planta de la firma en Sudáfrica.
Al igual que ocurrió con el Ford Fiesta hace meses, el Polo no ha sobrevivido a la embestida de los coches eléctricos, y la baja rentabilidad de este segmento urbano unida a las crecientes limitaciones de emisiones que penalizan el precio de los coches nuevos, han obligado al grupo germano a buscarle un nuevo destino en Sudáfrica, desde donde se cubrirá la demanda mundial del modelo.
Hasta siempre
La decisión no hay que verla con los ojos actuales, con la electrificación inexplicablemente ralentizada, sino con los de hace un par de años cuando toda Europea confiaba que a día de hoy la cuota de eléctricos en el Viejo Continente rondaría el 30 % y los coches de combustible deberían estar ya arrinconados.
De la mano del Polo la factoría de Landaben vivió una verdadera revolución industrial
En teoría este utilitario deja sitio en la factoría de Landaben para la fabricación de dos modelos eléctricos que aún están por llegar y que pueden tardar más de la cuenta si el ritmo de ventas de eléctricos no mejora de forma ostensible.
Recordemos que en la planta de Ford en Almussafes, Valencia, la marca del óvalo ha detenido sine die los planes para la producción de otros dos eléctricos y los ha sustituido por un híbrido que debería llegar en 2027.
Esta fábrica supone un 30 % del producto interior bruto de la Comunidad Foral de Navarra
En la historia del modelo hay que recordar seis generaciones del modelo, de las que cinco se han producido en Navarra. El modelo nació en 1974, pero no llegó a Landaben hasta 1981 tras un acuerdo entre el Instituto Nacional de Industria (INI) y Volkswagen.
Un cincuentón resultón
En su historia llaman la atención algunas versiones como el Harlekin (con k y con h) de 1995, que mezclaba hasta cuatro colores en la carrocería y que supuso un gran éxito para la firma, que planteaba producir unos 30 y al final hizo 3.800 unidades.
Polo Harlekin, hoy en día por encima de los 5.000 euros
Pero la tozuda realidad ha quebrado los planes de este modelo conocido como el hermano pequeño del VW Golf, un vehículo que permitía a los jóvenes bien entrar a la marca hasta poder permitirse dar el salto a su hermano mayor.
Dos superventas
En este momento la marca se centra en la producción de otros dos vehículos superventas, Taigo y T-Cross, por lo que no existe el menor problema en materia de volumen de producción.
En este caso si las cosas van como deberían, en 2027 la firma comenzará a producir dos vehículos eléctricos, el pequeño VW ID.2 de 25.000 euros y un SUV urbano de la marca Skoda.
VW ID.2, el eléctrico para la planta española de Landaben
La planta de Landaben es hoy una las mejores del grupo en el mundo, que cuenta con 119 factorías, produce 1.438 coches al día, al ritmo de uno cada 54,6 segundos. Su excelencia en materia de calidad es tal que el Grupo VW distinguió el lanzamiento del Taigo como el mejor de la historia de la marca, hitos que permiten entender la importancia estratégica de la misma.
