Mr. Handsome y la estrategia del matón

Como ya sabrán, hace unos días supimos por The Ojective que el perfil de X llamado Mr. Handsome y dedicado a la exaltación de Pedro Sánchez no es de una admiradora entusiasta del presidente, como pretende, sino de una asesora del PSOE pagada por el Congreso y llamada Montserrat Gusano. Al margen de la enésima mentira de Sánchez, también en las redes sociales, lo interesante de esta cuenta de X es que refleja muy bien tanto la psicología del personaje como la estrategia política socialista.

Gusano es una hábil publicista que ha sabido captar la esencia de su cliente y la ha convertido en una eficaz arma política. Se entiende por qué la contrató Sánchez. La esencia es el narcisismo, el narcisismo de alguien que es feliz con una cuenta llamada Sr. Guapo, que no se siente incómodo o ridículo con el nombre, como lo estaría la mayoría de la gente, sino todo lo contrario, que lo disfruta con inmenso placer. Gusano captó a la perfección la debilidad psicológica principal de Sánchez y éste se rindió a sus pies.

Pero, además, Gusano captó también a la perfección el segundo rasgo del personaje, el matonismo, la psicología del tipo que quiere ganar sin importarle los medios, que disfruta aplastando a sus adversarios. Gusano ha hecho de ese rasgo un activo político, convirtiendo el narcisismo, la chulería y la agresividad en atributos del Sr. Guapo, del hombre capaz de tumbar a todos sus enemigos. Del killer despiadado admirado por las masas por su agresividad y falta de escrúpulos. Buena parte de la estrategia de comunicación del PSOE se ha basado en ese mensaje y esta página de X es un excelente ejemplo.

Probablemente fue Gusano la que ideó la campaña del Perro Sanxe de las elecciones de 2023, que ella sigue usando una y otra vez. Aquella invención de que insultaban de esa manera a Sánchez y la conversión del inventado insulto en una cualidad. Recordarán a Begoña Sánchez y algunos ministros con camisetas y pins de Perro Sanxe, en perfecta exaltación de la figura del macarra narcisista. En realidad, la verdadera campaña contra Sánchez fue la del «Que te vote Txapote», pero, por supuesto, no se pusieron ninguna camiseta con el «Que me vote Txapote». Tampoco parece que vaya a haber ninguna cuenta de exaltación de Sánchez llamada Sra. Gusano, y eso que la propia Gusano lo sugirió, llamando a resignificar la palabra gusano como ella lo había hecho con perro.

Pues bien, esta estrategia del matón explica en parte cómo es posible que este político siga sobreviviendo a decisiones como la ley de amnistía. El jueves, cuando entró al hemiciclo para votar, era Mr. Handsome el que llegaba, con el lenguaje corporal de un matón enormemente satisfecho que se disponía de nuevo a ganar. Da lo mismo el qué y el cómo. Lo que cuenta es el resultado de la votación, el triunfo. Y eso está funcionando en una buena parte de los votantes socialistas. La sumisión al que gana, al más fuerte, al más implacable. La psicología de masas, que diría Wilheim Reich, pero no del fascismo, sino del sanchismo.

Una psicología de masas del sanchismo tan extendida que una cuenta como la de Mr. Handsome no es una sátira, sino una propaganda eficaz del PSOE. Y, por supuesto, y precisamente por eso, a nadie del cine español se le ha ocurrido la película satírica correspondiente y que ya tiene el título, Mr. Handsome, y en la que imagino perfecto a Steve Carell haciendo de Sánchez, aunque tampoco estaría mal Jim Carrey.