Francisco recibe el alta y reaparece desde el Gemelli: «He experimentado la paciencia del Señor en estos días»

Después de 39 días ingresado en el Hospital Gemelli de Roma, el mundo vuelve a ver al Papa Francisco. La expectación es máxima: en la entrada del hospital, alrededor de 500 a 600 personas, entre fieles, periodistas y fotógrafos, se agolpan para captar el momento. En la Plaza de San Pedro, las pantallas retransmiten en directo cada detalle del regreso del Pontífice. El alcalde de Roma, Roberto Gualtieri, también está presente para presenciar este momento histórico. La multitud aplaude y grita «¡Francesco!» al unísono.

Finalmente, desde la quinta planta del hospital, el Papa se asoma al balcón del Gemelli para saludar a los miles de presentes. Las únicas palabras que el Santo Padre ha dirigido en su aparición han sido para una señora que llevaba un ramo de flores amarillas. Al verla, sonrió y exclamó: «Veo una señora con flores amarillas, ¡brava!».

Tras haber luchado contra una bronquitis que derivó en una neumonía bilateral, Francisco recibe finalmente el alta médica este domingo. Su evolución en las últimas dos semanas ha sido favorable, lo que ha permitido que su equipo médico apruebe su regreso a la residencia de Santa Marta, en el Vaticano, donde continuará con su recuperación.

Poco después de que la Santa Sede difundiera el texto del Ángelus, el Santo Padre ha querido asomarse brevemente desde el balcón del hospital para saludar a los fieles y dar su bendición. Aunque no ha podido rezar el Ángelus como es habitual, su mensaje ha sido difundido íntegramente, reflejando su profunda gratitud por las oraciones y cuidados recibidos.

«En este largo tiempo de reclusión, he experimentado la paciencia del Señor, que también veo reflejada en la premura incansable de los médicos y sanitarios, así como en los cuidados y esperanzas de los familiares de los enfermos», ha afirmado Francisco en su mensaje. Inspirado en la parábola de la higuera estéril del Evangelio de este domingo, el Papa ha subrayado que el Señor no se cansa de esperar, de confiar y de seguir abonando la vida de cada persona, aun cuando parece que no da fruto.

La perseverancia en la oración

El Pontífice ha querido dejar pasar la ocasión para abordar la actualidad internacional, manifestando su «profundo dolor» por la reanudación de los bombardeos en la Franja de Gaza y pidiendo el «cese inmediato de las armas». Ha instado a la liberación de todos los rehenes y ha urgido a un alto el fuego definitivo, recordando que la situación humanitaria en la región es «gravísima» y que requiere un esfuerzo urgente de la comunidad internacional.

Por otro lado, ha celebrado la reciente firma del texto definitivo del Acuerdo de Paz entre Armenia y Azerbaiyán, esperando que esta iniciativa sirva para consolidar la estabilidad en el Cáucaso meridional.

A pesar de las dificultades, Francisco ha querido expresar su gratitud por las numerosas oraciones que ha recibido durante su hospitalización. «Con tanta paciencia y perseverancia seguís rezando por mí: ¡muchas gracias!», ha dicho, asegurando a su vez que él también reza por los fieles y por el fin de los conflictos que golpean al mundo.

Un alta prudente para una recuperación paciente

El Papa Francisco regresa este domingo 23 de marzo al Vaticano tras 38 días de hospitalización en el Gemelli a causa de una neumonía bilateral. Su salida del hospital ya fue anunciada ayer sábado por el equipo médico que lo ha atendido durante este tiempo. «El Papa vuelve mañana al Vaticano», confirmaron el doctor Sergio Alfieri y Luigi Carbone, quienes detallaron que su estado de salud había evolucionado favorablemente en los últimos semanas.

Los últimos informes médicos difundidos por la Santa Sede ya adelantaban signos claros de mejoría: Francisco había dejado atrás la ventilación mecánica nocturna y apenas necesitaba oxígeno de alto flujo. Sin embargo, los especialistas fueron tajantes en un punto: la recuperación será larga. «Al menos dos meses de convalecencia», señalaron, subrayando que su regreso al Vaticano no implica el retorno inmediato a su agenda habitual.

Antes de regresar a Casa Santa Marta tras abandonar el hospital, el Papa Francisco se dirigió a Santa Maria Maggiore y entregó al cardenal Makrickas unas flores para que las depositara ante el icono de la Virgen Salus Populi Romani.

El Pontífice regresa a la residencia de Santa Marta, donde todo está listo para su convalecencia. Los médicos han insistido en que debe tomarse el tiempo necesario antes de retomar su agenda, pero aseguran que su ánimo nunca decayó. «Está contentísimo», afirmaron, revelando que en más de una ocasión les preguntó: «¿Cuándo volveré a casa?». La espera ha terminado. Finalmente, Francisco vuelve al Vaticano.