
Conejo de monte en España
La amenaza por la plaga de conejos gigantes ya es urgente en el granero de España
La plaga de conejos que asola los cultivos en España, especialmente en el sur de la Comunidad de Madrid y en Castilla-La Mancha, extiende su huella por el territorio nacional.
Esta invasión que denuncian los agricultores desde hace más de 20 años apunta a un conejo un tanto diferente. La reclamación condena la superpoblación del teórico conejo de monte; sin embargo, los productores señalan que no se trata de la especie autóctona y sí de un híbrido introducido a principios de siglo a través de los programas medioambientales para servir de alimento para el lince y el águila imperial.
Los productores señalan que el conejo que tira por tierra sus cosechas pesa más del doble que uno de monte, 1,5 kilos por los 700 gramos del autóctono, y además ha desplazado al natural de la Península Ibérica. Esta crisis ha provocado la emergencia cinegética en la región castellanomanchega y ahora son los agricultores de Castilla y León, granero de España, los que claman por una solución urgente que mantenga a salvo sus campos.
Donaciado Dujo, presidente de Asaja Castilla y León, y Esteban Martínez, presidente de Asaja Burgos, una de las provincias más afectadas por las andanzas de este pequeño mamífero, han mantenido un encuentro con Nicanor Sen, delegado del Gobierno en la región, para exigir que medie para lograr una actuación coordinada de las administraciones competentes para que se actúe sobre las infraestructuras públicas, que son el principal reservorio de los conejos.El conejo convierte los márgenes de las infraestructuras ferroviarias o las cunetas de las carreteras en su mejor refugio. El animal posiciona en estos rincones sus madrigueras, donde se reproduce sin la amenaza de sus depredadores, para luego acudir a por comida a las explotaciones. Trigo, cebada, triticale y colzas se distinguen como su menú por excelencia.
La organización profesional agrícola ha solicitado a la Junta que «actúe con urgencia» en las infraestructuras del Estado, red de carreteras y también en el trazado ferroviario (ADIF), aunque también son necesarias actuaciones por parte de la Confederación Hidrográfica del Duero y las entidades provinciales o locales.
«Se requiere una actuación coordinada de todas las partes para corregir el problema, ya que la plaga de conejos está siendo impulsada porque encuentra condiciones idóneas para su proliferación principalmente en las condiciones actuales de autovías y líneas de AVE, pero también en algunos polígonos, escombreras y vertederos», ha apuntado Dujo.
La densidad de conejos en suelo agrícola es especialmente señalada en el triángulo formado por Valladolid, Burgos y Palencia, aunque Asaja advierte que «se están dispersando por la meseta y causando problemas prácticamente en todas las provincias».
El desarrollo del conejo, más allá de las implicaciones para el sector primario, podría implicar problemas sanitarios en los núcleos urbanos, ya que es una especia transmisora de enfermedades. «Los conejos son hoy un problema de compleja solución, con una dinámica expansiva tanto en Castilla y León como en otras comunidades autónomas de España», subraya Asaja, que ha expuesto un plan sustentado en tres actuaciones.
«Que en todas las obras que ahora mismo están en proceso o las nuevas que se proyecten se tenga en cuenta de partida la instalación de mallas u otros mecanismos que impidan que se socaven huras; que en las infraestructuras que ya existen, dentro de las concesiones de mantenimiento se establezcan medidas para evitar el asentamiento de las colonias de conejos; el Estado debe asumir los daños del conejo, que el mal estado de mantenimiento de sus infraestructuras está permitiendo», concluye la organización.