
El precio de la crianza
¿Cuánto cuesta criar a un hijo en España?
Este descenso de población en España se debe a múltiples factores, entre los que podemos encontrar el coste de criar a un hijo
En el año 2024 se contabilizaron en España un total de 322.034 nacimientos, lo que supone un ligero incremento del 0,4 % en comparación con el ejercicio anterior. Este aumento, aunque modesto, constituye el primer repunte de la natalidad registrado en la última década, de acuerdo con los datos provisionales difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Sin embargo, este avance no ha sido suficiente para revertir la tendencia demográfica negativa, ya que el número de fallecimientos continuó superando al de nacimientos. En el mismo periodo, se produjeron 439.146 defunciones, cifra que representa un incremento del 0,7 % respecto a 2023.
Como consecuencia de esta dinámica, el saldo vegetativo —es decir, la diferencia entre los nacimientos y las muertes— fue negativo, con un descenso poblacional de 114.937 personas a lo largo del año.
Este descenso de población en España se debe a múltiples factores, entre los que podemos encontrar el retraso en la maternidad, una conciliación insuficiente, la inestabilidad económica y laboral, el cambio de valores y prioridades y, por supuesto, el costo de criar a un hijo.Cuánto cuesta criar a un hijo en España
Según el informe El corte de la crianza en 2024, publicado por Save the Children España, el coste medio mensual de criar a un hijo en España es de 758 euros, un incremento del 13 % respecto a 2022 y del 29 % desde 2018, impulsado principalmente por el alza en alimentos y suministros del hogar. La inflación ha afectado de forma desproporcionada a los hogares con menores, generando una «inflación específica de la crianza» superior a la general. Además, los costes varían por edad: son menores entre 0 y 3 años (604 €) y más altos durante la infancia intermedia (7-12 años, con 812 €) y la adolescencia (807 €).
El informe también revela fuertes diferencias regionales: Cataluña es la comunidad con el coste más elevado (938 €/mes), mientras que Andalucía presenta el más bajo (722 €/mes). Estas diferencias responden principalmente a los gastos en vivienda y educación. En cuanto al tipo de hogar, las familias más afectadas por el coste de la crianza son las de rentas bajas, especialmente las monoparentales, que presentan tasas de pobreza estructural elevadas y dificultades para cubrir necesidades básicas.
Uno de los datos más preocupantes es que 1 de cada 2 familias con hijos debe destinar más del 57 % de su renta disponible a la crianza, y el 10 % más pobre no puede afrontarla ni dedicando el 100 % de sus ingresos. La falta de un sistema robusto de apoyo a la crianza, sumado a prestaciones ineficaces o mal diseñadas, agrava esta situación y limita las oportunidades de la infancia. La carencia social y material severa ha subido al 12,3 %, afectando ya a cerca de un millón de niños y niñas en España.
Como respuesta, el informe propone tres líneas de actuación clave: implementar una prestación universal por hijo a cargo; rediseñar el Complemento de Ayuda para la Infancia (CAPI), sobre todo para adolescentes; y vincular las actualizaciones de estas ayudas a un índice específico del coste de la crianza. Estas medidas permitirían mejorar el bienestar de las familias y romper con el ciclo de pobreza infantil, reconociendo la crianza como una responsabilidad colectiva que debe ser apoyada con políticas públicas eficaces.