En marcha hacia Covadonga: 2.000 jóvenes se citan este verano en el santuario para una jornada eucarística

La Fundación «En Marcha» sigue adelante con la organización de la primera Jornada Eucarística Mariana Juvenil (JEMJ), una herramienta al servicio de la evangelización de los jóvenes, para ofrecerles una experiencia de Cristo vivo en la Eucaristía, de la mano de María, Nuestra Madre. Tendrá lugar del 5 al 7 de julio de 2024 en el Santuario de Covadonga (España), dirigido a jóvenes entre los 14 y los 30 años.

Todo comenzó cuando se hicieron públicos los resultados de una encuesta que revelaba que el 70 % de los jóvenes de los EEUU no creen en la presencia real de Cristo en la Eucaristía. A estos datos, la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB) respondió lanzando el Renacimiento Eucarístico Nacional. No es necesario repetir la encuesta en España para saber que los resultados no serían muy distintos. Sin adoptar posturas derrotistas, se han levantado a pelear por nuestros jóvenes, trabajando para ofrecerles una experiencia personal de Cristo vivo en la Eucaristía, a través de la adoración, la música, la formación, los testimonios, de la mano de Nuestra Madre, la Virgen María. Ese día nació la Jornada Eucarística Mariana Juvenil: una herramienta al servicio de la evangelización de los jóvenes. Esta es la clave para entender la JEMJ. Es una herramienta de evangelización al servicio de toda la Iglesia, para la evangelización de los jóvenes a través de un encuentro personal con Cristo en la Eucaristía.

Jesús Sanz, arzobispo de Oviedo, estará presente en Covadonga durante la JEMJ y presidirá la Santa Misa de clausura el 7 de julio de 2024. A él se van uniendo otros miembros del episcopado español, en concreto Mons. D. Antonio Prieto Lucena, obispo de Alcalá de Henares, que dará una charla de formación a los jóvenes, en la mañana del sábado 6 de julio.

La elección del lugar tiene un sentido espiritual evidente: con la imagen de la Reconquista de España en nuestro corazón, lanzarnos a la reconquista de los corazones de los jóvenes para levantar la fe en España.

El lema de esta primera jornada es: «Levantad vuestros corazones». Han convocado a 2.000 jóvenes y ya hay grupos, diócesis, delegaciones diocesanas de jóvenes, movimientos, parroquias, confirmando su presencia. Aunque no puedan todavía precisar el número de jóvenes, es importante que los grupos hagan una preinscripción para que cuenten con ellos, porque hay movimientos barajando números muy grandes y tienen que, ir concretando, ya que pueden verse desbordados.

Las preinscripciones no llegan solo de España. Han recibido peticiones para participar desde Italia, EEUU, Ecuador, Perú, Irlanda, Canadá. Les ha impresionado esta dimensión internacional que ha cobrado la JEMJ desde el comienzo, gente muy distinta, que cuando escuchan hablar del proyecto, dicen que era necesario algo así. Con esta magnífica respuesta, se plantean ya, que buscar un sitio más grande porque Covadonga se va a quedar pequeño. Están en contacto con las autoridades militares para poner carpas en los parkings de Covadonga para facilitar el alojamiento gratuito de los jóvenes. Quien quiera otra cosa, hay oferta hostelera alrededor. Al margen de los autobuses contratados por cada grupo, pondrán autobuses que saldrán desde distintos puntos de España para facilitar el desplazamiento a los pequeños grupos.

Todo el ritmo del fin de semana va guiando el corazón de los jóvenes hasta la gran adoración del sábado al atardecer, que se prolongará a lo largo de la noche en turnos de adoración guiados por los distintos movimientos participantes. Cada hora se confiará a un movimiento, diócesis, quieren mostrar a los jóvenes distintos «lenguajes» dentro de la Iglesia católica para adorar a Jesús en la Eucaristía, cada uno con su estilo, pero todos igualmente católicos. Será una forma en que los jóvenes puedan conocer estos carismas y quizás descubrir la forma de adoración a la que se sienten llamados.

Hay mucho trabajo detrás de la JEMJ, pero es impresionante las carambolas de la Providencia que nos están facilitando muchas cosas. Al final, la última responsable es Nuestra Madre del Cielo, la Virgen María. Ella es la que convoca a sus hijos para que tengan este encuentro con Jesús Eucaristía, Ella va acomodando todo.