Qué cantidad de sal es necesaria y cómo saber si has tomado demasiada
Un exceso de sodio puede tener consecuencias nefastas para la salud
El sodio es un nutriente esencial para mantener el volumen plasmático, el equilibrio acidobásico, la transmisión de los impulsos nerviosos y el funcionamiento normal de las células. Sin embargo, un exceso de sodio puede tener consecuencias nefastas para la salud, en particular la hipertensión arterial.
La OMS recomienda en adultos consumir menos de 5 gramos de sal al día, lo que corresponde a poco menos que una cuchara de té mientras a en niños (de 2 a 15 años), la OMS recomienda ajustar a la baja la ingesta máxima recomendada para los adultos en función de las necesidades energéticas en relación con las de los adultos.
Como norma general, la sal que se consume debe ser yodada, es decir «enriquecida» con yodo, lo cual es esencial para un desarrollo sano del cerebro del feto y del niño pequeño así como para optimizar las funciones mentales en general.
Pippa Hill, nutricionista y fundadora de The Weight Loss Guru, y otros expertos en salud como Olivia Burley han compartido algunas de las señales más importantes de que estás comiendo demasiada sal.
Dolor de cabeza
La deshidratación causada por el consumo excesivo de sal puede provocar fuertes dolores de cabeza. Tienden a aparecer entre una o dos horas después de haber comido, ya que los niveles de sodio aumentan en el cuerpo
Tobillos, manos y pies hinchados
Un exceso de sal en la alimentación puede aumenta la retención de líquidos y causar hinchazón en tobillos, manos y pies.
Hipertensión
Cuando se consume demasiada sal, el cuerpo retiene el exceso de sodio y aumenta el líquido fuera de las células. Esto hace que los riñones tengan una función reducida, eliminen menos agua y, por lo tanto, aumenten la presión arterial.
La hipertensión, si no se trata, puede aumentar el riesgo de problemas graves como ataques cardíacos y accidentes cerebrovasculares.
Pippa Hills explica: «Si después de comer una dieta salada, sus síntomas incluyen visión borrosa, dolor en el pecho como una sensación de opresión, palpitaciones, dificultad para respirar o hemorragias nasales repentinas, podría significar que tiene presión arterial alta».
Micción frecuente
La sed excesiva es una respuesta común al consumo de alimentos salados. El cuerpo tiene como objetivo eliminar el exceso de sal y lleva a la persona a beber más líquido, lo que provoca una micción más frecuente.